A veces, desde la distancia, es fácil confundir un Bedlington Terrier con un cordero.
Estos pequeños perros tienen pelo rizado de color gris, azul o color canela que se asemeja a la de una oveja, lo que les da la apariencia distintiva. Se originan en la ciudad de Bedlington en Northumberland, Inglaterra. Ellos fueron criados originalmente para cazar y matar ratas en las minas. Esta práctica se abandonó más adelante, lo utilizaban para cosas más peligrosas y poco éticas, sus cría, las usaban para peleas de perros.
Bedlington Terriers son perros bastante contradictorios. Pueden ser increíble como miembros de la familia, son increíblemente amable con los niños, pero también son perfectamente capaces de matar a otro perro de su propio tamaño, gracias a sus fuertes mandíbulas.
Esta raza es susceptible a la toxicosis( intoxicación producida por el organismo) de cobre y puede sufrir de problemas en los ojos, pero aparte de que son generalmente sanos, con una esperanza de vida media de 13,5 años, lo que es más largo que la mayoría de las otras razas de su tamaño.
El Bedlington Terrier es juguetón, alegre y cariñoso, es un buen compañero de la familia. Le encantan los niños y bastante amigable con los extraños y muy juguetón, pero puede llegar a ser cabezón y terco si detecta que sus propietarios son pasivos. Esta raza tiene que aprender a llevarse bien con los gatos y otros y otros animales cuando es joven. Por lo general se llevan bien con otros perros, se aconseja tenerlos alejados de los perros dominantes, ya que son aterradores combatientes, a pesar de su apariencia suave. Son valientes y enérgicos. Se trata de excavadores entusiastas. Corren súper rápido y necesitan que se les enseñe a volver cuando se les llama. Suelen ser muy nervioso. Al igual que el Whippet, él es rápido y le encanta perseguir.