No ha habido estudios que hayan podido demostrar la existencia real de la depresión canina, pero muchos están convencidos de que los animales tienen emociones reales.
Es fácil ver que un perro está contento cuando su amo llega a casa después del trabajo, y también es fácil ver que están molestos cuando los regañan. Los perros parecen sufrir de dolor físico y emocional.
Un estudio reciente encontró que los dueños de mascotas han observado muchos tipos de emociones complejas en sus mascotas, como orgullo, vergüenza e incluso celos.
Esto no fue confirmado solo en perros, sino también en gatos, cerdos, caballos, conejos, ratas y hámsteres.
La depresión definitivamente puede ser una posibilidad real para los perros, ya que obviamente tienen muchas emociones reales que experimentan y muestran.
Todos los mamíferos parecen tener emociones que son de alguna manera comparables, por lo tanto, no está fuera de discusión que un perro puede estar deprimido, al igual que una persona puede hacerlo.
Lo difícil es hacer un diagnóstico real de la depresión del perro, porque los síntomas pueden ser los mismos que los síntomas que apuntan a muchos problemas diferentes.
Los síntomas como la pérdida de peso, la falta de interés en la comida, la bebida y la interacción, el letargo y el exceso de sueño pueden ser signos de muchos problemas en la salud del perro.
Se necesitarán exámenes médicos para ver si hay otros problemas médicos presentes. El veterinario debe incluso verificar si hay algún desequilibrio químico o incluso una disfunción relacionada con la tiroides.
Causas de la depresión del perro
Algunas personas que tienen estudios sobre la depresión canina dicen que el cambio es lo que más frecuentemente estimula la depresión. Tal vez la muerte repentina de una mascota compañera o un dueño podría hacer que un perro se deprima.
A veces, un movimiento que da como resultado un cambio de escenario no deseado también puede causar depresión canina. En algunos casos, una nueva adición a la familia, como un bebé u otro perro, también puede hacer que un perro se deprima.
Tratamiento
Lo mejor que puedes hacer es tratar de mantener al perro enfocado en su horario regular. Pasee al perro y juegue con él regularmente y guarde muchos de sus juguetes viejos. Es importante introducir lentamente nuevas personas y nuevos lugares para un perro. Y también es muy importante permitir que el perro husmee y explore por sí solo para que pueda familiarizarse con las cosas nuevas que se han introducido en su vida.
La buena noticia es que la depresión en los perros tiende a ser fugaz y tienden a ser capaces de acostumbrarse a cosas nuevas y dejar atrás las viejas formas mucho más fácilmente que los humanos.