Medicinar a un perro puede ser difícil. Algunos perros toman pastillas de buena gana, pero la gran mayoría no. ¿Cuál es la mejor manera de administrar pastillas a un perro que no coopera? Canandcam ha compilado una lista de consejos útiles para ayudarte a darle pastillas a tu perro.
Esconderlo en un regalo
Muy pocos perros comerán una píldora desnuda, por lo que es posible que tenga que esconder el medicamento en un convite. Coge varios trozos grandes de un dulce que adora tu perro, como queso, queso crema o comida enlatada. Divida la golosina en varios bocados pequeños y aliméntelos a su perro de uno en uno. Asegúrese de darle al perro varias mordidas sin una pastilla antes de que intente darle al perro el trozo que contiene la píldora. Muchos perros comerán píldoras sin dudarlo de esta manera.
Considera el juego de atrapar
Si tienes un perro que adora atrapar, considera tirar la pastilla al perro como si fuera un placer. Muchos perros se tragarán una pastilla como esta antes de darse cuenta de que no fue, de hecho, una delicia. Para poder llevarlo a cabo con éxito, alégrese y excítese antes de tirar la pastilla. Haga que su perro se entusiasme con lo que viene y no dude en tirar la píldora al aire. Si el perro lo come, genial. Si no, prueba una táctica diferente. ¡Esperamos que la píldora sea rescatable!
Romper la píldora abierta y espolvorear en la comida
Este truco generalmente funciona para perros que comen rápido. Si su perro no toma una píldora que se tira o envuelve en un tratamiento suave, considere romper la píldora abierta si se trata de una cápsula de polvo y rociar sobre la comida del perro. Humedezca un poco la comida con agua para evitar que el polvo se filtre al fondo del recipiente y dele la cena a su perro. Muchos perros ingieren el contenido de la píldora de esta manera, aunque algunos notan el sabor del contenido de la píldora y dejan la cena intacta.
Pedir pastillas masticables
Debido a que dar píldoras a los perros puede ser tan difícil, muchas clínicas veterinarias ofrecen la misma píldora en una versión masticable y con sabor. Estas píldoras a menudo tienen sabor a ternera o pollo y saben exactamente como un dulce, a la vez que ofrecen un poder médico serio. Si su perro no va a comer las píldoras que su veterinario originalmente le dio, considere volver a llamar y preguntar si hay una opción masticable disponible.
Inserta la píldora
Si no puede hacer que su perro coma una pastilla a pesar de haber intentado todo, es hora de meter la pastilla en la garganta del perro manualmente. Sostenga la mandíbula superior de su perro abierta con una mano mientras usa la otra para colocar la píldora tan atrás en la garganta de su perro como pueda alcanzar. Retire la mano, mantenga la boca de su perro cerrada, apunte con la nariz hacia el techo y acaricie la garganta suavemente para estimular la deglución. Aunque este método puede ser estresante para perros y personas, generalmente es simple cuando se hace rápidamente y puede ser la forma más efectiva de asegurarse de que su perro reciba toda la medicación que necesita.