En la naturaleza, los perros protegen su comida de otros perros para establecer el dominio y asegurarse de que puedan alimentar a sus crías.
Sin embargo, en un entorno doméstico, la protección de recursos puede convertirse rápidamente en un comportamiento peligroso que puede provocar mordeduras o agresiones hacia humanos u otros perros.
Afortunadamente, a los perros a menudo se les puede desalentar la protección de recursos con algunos consejos simples.
La prevención es clave
Si tienes un cachorro joven, puedes cortar fácilmente el comportamiento protector de recursos de raíz. Una de las mejores maneras de evitar que los perros se vuelvan protectores sobre sus alimentos es ocasionalmente darles de comer a mano cuando son pequeños. Hacer esto le permite a un perro ver que usted no es una amenaza para su fuente de alimento, lo que significa que es mucho menos probable que reaccione agresivamente con otras personas o animales en el futuro. La alimentación manual solo debe realizarse con perros que no presenten ningún signo de agresión mientras comen.
Tratar el comportamiento de guarda de comida
Los perros comienzan a cuidar los alimentos porque les preocupa que sus recursos (en este caso, los alimentos) les serán quitados. Dicho esto, tratar el comportamiento de guarda de comida de un perro implica condicionar al perro para que comprenda que su fuente de alimento no está en peligro. Comience a tratar el comportamiento de protección de alimentos de su perro de las siguientes maneras:
- Preséntese a la hora de comer: Al principio, los padres de mascotas deben simplemente pararse junto al plato del perro mientras come. En momentos intermitentes a lo largo de la comida, puede lanzar un regalo especial en el cuenco del perro. Sin embargo, no se acerque al perro ni intente moverlo ni ajustarlo. Simplemente quédate a un metro y medio del cuenco durante varias comidas consecutivas.
- Comience a acercarse: una vez que el perro haya comenzado a sentirse cómodo con su presencia cerca del tazón a la hora de comer, comience a acercarse cada día hasta que esté cerca de la cabeza del perro durante la comida. Observe cuidadosamente el cuerpo del perro en busca de signos de estrés o agresión y, si el perro parece ansioso, retroceda.
- Proporcione golosinas durante la hora de la comida: Una vez que el perro se sienta cómodo con usted de pie cerca de su plato, comience a ofrecer una golosina durante la hora de la comida. Agáchese hasta el nivel del perro, ofrezca el alimento y aléjese tan pronto como el perro se lo coma. Esto le enseña al perro a valorar su presencia cerca de su comida y a no preocuparse de que le quiten la comida. A medida que el perro se sienta más cómodo con esta acción, puede comenzar a levantar el cuenco para dejar caer la golosina en él mientras su perro come. Siempre tenga en cuenta el lenguaje corporal del perro y manténgase a una distancia segura si parece ansioso o molesto.
Algunas precauciones
Recuerde que la protección de los alimentos es un comportamiento profundamente arraigado y muchos perros se volverán rápidamente agresivos cuando una persona o un animal se acerque a su comida. Si su perro exhibe este comportamiento, detenga su programa de entrenamiento y lleve al perro a un conductista de mascotas certificado o a un veterinario para buscar tratamiento adicional y descartar causas médicas. Aunque la mayoría de los perros pueden ser entrenados fuera de su comportamiento de protección de alimentos, el proceso requiere mucho tiempo y paciencia.