Si alguna vez has estado cerca de un cachorro, entiendes el tipo de dolor que los dientes de cachorro pueden infligir.
Los dientes de cachorro afilados como agujas, pequeños y sorprendentemente rápidos pueden romper la piel sin mucho esfuerzo. Aunque los cachorros rara vez hieren a las personas que los rodean, su comportamiento natural de la boca puede convertirse rápidamente en un problema.
Por qué muerden los cachorros
Un cachorro agarra las manos, la piel, la ropa o el cabello de una persona durante el juego o la emoción. En realidad, es un comportamiento muy común y la mayoría de los cachorros se dirigen a la gente en algún momento u otro. «¿Pero por qué?», Puede preguntar.
Al igual que los bebés, los cachorros exploran con la boca. Piensa en un bebé, este meterá todo lo que esté a su alcance en la boca, babeando, royendo y buscando alivio para sus doloridas encías. Los cachorros son de la misma manera. A menudo, el comportamiento de morder se eleva a partir del dolor de la dentición y se puede moderar o erradicar mediante la oferta de juguetes masticables apropiados.
En otros casos, se debe a un entrenamiento deficiente, al juego inapropiado o como resultado de la emoción.
Independientemente de por qué un cachorro muerde a las personas, hay formas de reducirlo, redirigir la atención y también para evitar que este comportamiento se convierta en un accesorio permanente cuando el cachorro se mueve en la edad adulta.
Cómo controlar la boca del cachorro
La consistencia puede hacer o romper cualquier esfuerzo de entrenamiento y esto es particularmente cierto con la boca de los cachorros. Con eso en mente, pruebe los siguientes consejos y trucos:
- Ofrezca muchos juguetes para masticar: dado que muchos cachorros muerden como un método para sobrellevar el dolor de la dentición, el comportamiento a menudo se puede mitigar o erradicar proporcionando al perro una variedad de juguetes masticables aceptables y asegurándose de que estén siempre disponibles. Si el cachorro hace un movimiento para engancharse a la piel, redirija los esfuerzos del perro a un juguete. También tenga cuidado de no alentar inadvertidamente al cachorro a que muerda durante el juego, ya que esto solo solidificará el comportamiento.
- Redirija su atención cuando el perro se pone bocón: si un cachorro comienza a ser bocón, simplemente retire toda su atención de inmediato. No castigue al perro ni reaccione violentamente, simplemente levántese y aléjese sin prestarle atención al cachorro. También tiene la opción de poner rápidamente al perro en su caja y sacarlo de nuevo solo cuando se haya calmado.
- Proporcione un montón de refuerzo positivo: cuando un cachorro juega sin morder, asegúrese de permitir que el juego continúe, alentando al perro por su comportamiento bueno y gentil. Cuando el perro es recompensado por su buen comportamiento, es mucho menos probable que vea exhibiciones de comportamiento deficiente en el futuro.