Debido a su pequeño tamaño, su apariencia única y su horario de fácil cuidado, las ratas son una mascota popular tanto para niños como para adultos.
Sorprendentemente inteligentes y sorprendentemente limpias, las ratas son una mascota ideal para interiores y pueden brindar años de compañía feliz.
Hemos reunido una útil guía para principiantes sobre cómo cuidar a su peludo amigo:
Consigue una gran jaula
Las ratas son animales sociales y, cuando se las deja a su suerte, eligen vivir en grupos grandes. Debido a esto, las ratas en cautiverio serán mucho más felices cuando las compren y les permitan vivir en parejas. Al elegir una jaula para tus nuevos amigos, considera el hecho de que a las ratas les encanta escalar. Por esta razón, las ratas serán más felices y saludables cuando se las mantenga en jaulas de alambre que les permitan trepar y explorar. Las jaulas de niveles múltiples son las mejores, aunque funcionará una jaula de piso único.
Generalmente, la jaula no debe tener menos de 60 cm cuadrados; cuanto más grande es la jaula, mejor. Los padres de rata deben evitar comprar jaulas con fondos de alambre, ya que pueden lesionar los pies de la rata y crear un ambiente insalubre. Las jaulas con fondos sólidos son las mejores y deben revestirse con pellets reciclados o ropa de cama con base de álamo. A las ratas, naturalmente, les encanta hacer nidos y se divertirán mucho hurgando en la cama profunda.
Suministrar los nuevos alojamientos
Las ratas aman los muebles y apreciarán una jaula llena de tubos, ramas, ruedas de ejercicios y lugares para esconderse. Muchos padres de ratas eligen incorporar tubos de PVC, palos, ramitas y bloques de madera sin tratar, así como juguetes de ratas comprados en la tienda en las jaulas de sus mascotas. Las ratas son criaturas activas y las ratas aburridas pueden deprimirse fácilmente y ser infelices. Para evitar esto, asegúrese de proporcionar a su rata muchos juguetes y cambiarlos a menudo para mantener un nivel de estimulación e interés en la jaula.
Mantente al tanto de la limpieza
Las ratas generalmente son animales limpios, pero la jaula aún tendrá que limpiarse a fondo todos los días. Con el fin de garantizar la mejor salud y felicidad posible para la rata, elimine los excrementos, la ropa de cama húmeda y los alimentos no consumidos de la jaula y asegúrese de proporcionar alimentos frescos y agua al menos diariamente, si no con más frecuencia. Una vez a la semana, la jaula se debe desmontar y todas las superficies, incluidos los juguetes y los muebles, se deben fregar a fondo con agua tibia y jabón.
Alimentando a tu rata
Las ratas son comedores voraces y disfrutarán de alimentos como brócoli, zanahorias, plátanos y verduras de hoja verde. Para agregar fibra dietética, las ratas también pueden ser alimentadas con pasta cocida, pedazos de pollo cocido y huevo o incluso una pequeña cantidad de pan. Para complementar estos alimentos, las ratas deben consumir una dieta diaria de pellets de rata comprados en la tienda que ofrecen mucha proteína y harina de soja. Las ratas deben tener libre acceso a los alimentos peletizados y se les permite comer tanto o tan poco como lo consideren necesario.