La palabra «sangrado» se usa para describir a un caballo que sangra por las fosas nasales durante o después de un período de duro trabajo.
Esto puede ser aterrador para cualquier dueño de un caballo, especialmente para aquellos que nunca han tenido un caballo con sangrado o que hayan oído hablar de esto antes. La cantidad de sangre varía mucho según el caso, desde una pequeña cantidad hasta un chorro de sangre que puede ser potencialmente mortal.
Síntomas
- Sangre roja brillante en una o ambas fosas nasales
Causas
- Sangrado de las vías respiratorias inferiores debido a un trabajo o ejercicio exhaustivo (hemorragia pulmonar inducida por ejercicio)
- Hematoma etmoidal (un crecimiento en la parte posterior de la nariz)
- Una infección por hongos en la bolsa gutural (área llena de aire en el cráneo detrás de los senos paranasales)
- Trauma de la cabeza
Diagnóstico
Si el sangrado ocurre después de entrenamientos estresantes (como con los caballos de carrera), se debe realizar un examen endoscópico. Esta prueba puede diagnosticar una hemorragia pulmonar inducida por ejercicio. Si el sangrado nasal ocurre de manera espontánea, es posible que se necesiten radiografías de la cabeza e incluso más pruebas, como resonancias magnéticas, para diagnosticar la causa.
Tratamiento
El tratamiento solo se puede determinar una vez que se haya descubierto la causa de la hemorragia, ya que no existe un tratamiento real para la hemorragia, solo por la causa raíz del sangrado en sí.
Vivir y administrar
Dependiendo de la causa, se deben tomar diferentes pasos después del tratamiento para asegurar que su caballo esté saludable y el sangrado se detenga. Un caballo con hemorragia pulmonar inducida por ejercicio generalmente se puede manejar con ciertos medicamentos y continuar una exitosa carrera atlética. Sin embargo, un caballo con una infección fúngica requerirá fuertes medicamentos antifúngicos o incluso cirugía para eliminar la infección.