El estrés en el trabajo es uno de los principales enemigos de hombres y mujeres modernos. Las empresas están perdiendo grandes cantidades de dinero pagando sus estresados tratamientos a los trabajadores, mientras que cada vez más personas que trabajan toman antidepresivos de manera regular y diaria.
La depresión es solo uno de los resultados de una cantidad excesiva de estrés «en la oficina». Existen muchos otros escenarios que presentan el resultado, la muerte temprana o la inestabilidad mental son algunos de los peores. El estrés en el trabajo, sin embargo, consiste en muchas pequeñas perturbaciones, frustraciones y muchas otras cosas que, combinadas entre sí, aumentan la presión, y finalmente, conducen a la ruptura de uno.
Causas del estrés en el trabajo
Trabajar demasiado duro o apenas trabajar en absoluto puede provocar estrés. A menudo, hay poca organización del trabajo por hacer, y algunas personas terminan haciendo más de lo que pueden, terminando estresado y frustrado. Los plazos imposibles solo aumentan la cantidad de estrés involucrado en el proceso de trabajo. Los gerentes y empleadores deberían dividir el trabajo por igual y deberían emplear a más personas si el número actual resulta ser insuficiente. Desafortunadamente, esto rara vez sucede.
Otra causa de estrés es la interrupción constante. Es decir, si un trabajador no puede concentrarse en su trabajo porque le distraen interminablemente las llamadas telefónicas, los mensajes, las tareas adicionales y muchas otras cosas, él o ella se estresarán. El estrés reduce la concentración, y por lo tanto, la calidad del trabajo en sí. Además, la falta de información dada al trabajador combinada con todas las causas estresantes mencionadas anteriormente, solo empeora las cosas.
La gente tiende a percibir el trabajo como lucha y competencia. La gente camina sobre otras personas para conseguir el trabajo en primer lugar. Después de hacer eso, constantemente tienen que probarse a sí mismos y a sus superiores para mantener su lugar de trabajo. Sus compañeros de trabajo a menudo son sus enemigos, ya que lo único que los une es la competencia. Esta visión de la vida y el trabajo es increíblemente estresante. Además, el mero hecho de que sea también la realidad lo empeora aún más. La gente debería concentrarse en el trabajo en equipo en lugar de tratar de apuñalarse por la espalda por el bien del dinero. El materialismo tiende a eliminar todas las características que nos hacen humanos, dejando solo la envidia y el estrés.
El estrés viene con el trabajo si al trabajador le disgusta lo que está haciendo. Las malas condiciones de trabajo y los trabajos inadecuados hacen que un trabajador este descontento y frustrado. Además, la falta de retroalimentación tanto positiva como negativa da origen a la incertidumbre y la duda. Los superiores deben reconocer y apreciar los logros de sus trabajadores. De esa manera, los que trabajan seguirán dando lo mejor de sí mismos. Finalmente, la comunicación y la cooperación entre los trabajadores y sus superiores proporciona un ambiente creativo y asegura la máxima productividad con cantidades mínimas de estrés. Habla, en lugar de ordenar, escucha en lugar de exigir, y tendrás trabajadores satisfechos y valiosos.