Las cicatrices hiperotróficas son cicatrices hinchadas y rojas que pueden ser dolorosas o con picazón.
Son similares a los queloides en apariencia, pero las cicatrices hiperotróficas se comportan un poco diferente.
Las cicatrices queloides, son cicatrices que crecen grandes y sobresalen los límites de la herida original. Son difíciles de tratar ya que tienden a recurrir. Los queloides también son difíciles de prevenir. El pecho superior, los hombros y la parte superior de la espalda son especialmente propensos a la formación de queloides.
La cicatriz hiperótrofa no crece ni se disemina, pero continúa engrosándose hasta por 6 meses. Después de un año o dos, la cicatriz puede encogerse y volverse menos visible, pero puede causar movimientos restrictivos si se encuentran cerca de las articulaciones u otras áreas de incidentes. También pueden causar angustia debido a la apariencia y picazón. Las cicatrices hiperotróficas suelen ser firmes al tacto y pueden ser sensibles a los cambios de temperatura.
No hay una razón particular por la cual las cicatrices hiperotróficas ocurren. Esto generalmente sucede debido a diversas circunstancias. En general, el colágeno tiene un papel vital en la formación de cicatrices hipertrofíticas. En caso de desequilibrio entre las fases anabólicas y catabólicas del proceso de curación, se produce más colágeno y la cicatriz crece en todas las direcciones.
Las cicatrices hiperotróficas son más comunes en personas jóvenes y pigmentadas. Además, las cicatrices hiperotróficas pueden desarrollarse en personas que tienen una tendencia heredada a este tipo de cicatrices.
Estas cicatrices pueden causar picazón y dolor debido a la falta de glándulas sebáceas y tejido elástico. Cuando las cicatrices hiperotróficas se desarrollan en amplias áreas de la piel, debido a alguna herida o quemaduras masivas, pueden ser particularmente dolorosas y causar dificultades de movimiento.
Tratamiento de cicatrices hiperotróficas
Las cicatrices hiperotróficas generalmente se manejan con un tratamiento conservador. Las inyecciones de esteroides se pueden administrar para reducir el tamaño de la cicatriz. Los remedios naturales también pueden ayudar a reducir la cicatriz. Esto incluye aceite de árbol de té, baños de sal y aceite de vitamina E aplicado por vía tópica.
Si nada de esto ayuda, la cirugía se puede utilizar para reducir o eliminar la cicatriz. El láser es una de las opciones preferidas, pero también hay otros métodos. Otros métodos de tratamiento incluyen criocirugía (congelación), escisión, láser y radiografías.
Prevención de cicatrices hiperotróficas
La formación de cicatrices hiperotróficas después de una lesión se puede prevenir o reducir mediante el uso de vendaje a presión, almohadilla de gel de silicona o cinta de papel en las lesiones. Las personas con cicatrices hiperotróficas deben aplicar cuidadosamente la presión, ya que pueden causar el daño inadvertidamente. Se recomiendan almohadillas de presión si se quita la cicatriz quirúrgicamente para prevenir la recurrencia.