La ictericia es la coloración amarilla de la piel y la parte blanca del ojo, debido a la función hepática irregular, así como niveles anormalmente altos de pigmentos biliares en la sangre, que está conectado a la digestión.
Algunos de los síntomas incluyen la tremenda debilidad, falta de apetito, dolor de cabeza, náuseas y dolor de hígado.
Ictericia puede ser causada por una variedad de razones, una de las cuales es la incapacidad del cuerpo para cumplir las sales biliares y los pigmentos en el intestino, debido a algún obstáculo. Una vez que la bilis se mete en la sangre, el pigmento reacciona al afectar el color de la piel. En cuanto a el obstáculo, es generalmente el resultado de una enfermedad infecciosa que afecta al hígado. De hecho, otras posibles causas de la ictericia son en relación con algún trastorno de hígado. Algunos de ellos podría ser la malaria, la fiebre amarilla o la tuberculosis.
Los remedios caseros para la ictericia son numerosos y pueden ser extremadamente eficaces. Además, son completamente naturales y evasivos.
Uno de tales es el jugo de luffa amargo que puede ser extremadamente útil, pero por desgracia, no es para ser utilizado por todo el mundo, ya que puede causar algunos efectos secundarios a los consumidores más frágiles, como fiebre alta o migrañas. Sin embargo, si uno debe decidir tratar este medicamento, la manera de utilizarlo sería meterlo en la mano a través de un paño e insertarlo en las fosas nasales. Su efecto será la liberación de una cantidad considerable de toxinas que traerá un alivio significativo.
Otro remedio muy valioso para la ictericia son las hojas de rábano. Estas deben ser tomadas al igual que el luffa amargo. Aumentan el apetito y ayudan a limpiar los intestinos y el organismo de sustancias nocivas.
Uno de los remedios más populares para la ictericia es el tomate. El consumo de jugo de tomate recién exprimido con una pizca de sal y pimienta cada mañana debe ayudar a superar esta enfermedad.
Otra cosa que puede precipitar la recuperación de la ictericia es el jugo de caña con poco jugo de limón. Se recomienda hacerlo en casa con el fin de que sea completamente natural, ya que muchos jugos artificiales no tendrán efecto alguno en la lucha contra la ictericia.
Aparte de las curaciones mencionadas anteriormente que ayudan a la velocidad de la recuperación de la ictericia, hay algunas reglas básicas que deben seguirse por encima de todo. Las cuales consisten en una terapia de dieta y el descanso físico.
La dieta debe ser en forma de un jugo rápido durante la primera semana, y seguido por una dieta de fruta después de eso. Sólo entonces se puede empezar a incluir carbohidratos en la dieta. Todo esto es con el fin de permitir a los intestinos que limpien el sistema digestivo y volver a la normalidad.
Todo el tiempo el paciente debe asegurarse de tener suficiente descanso físico y no agotarse con el exceso de ejercicio.