Una infección de un folículo piloso es mejor conocido como un hervor. Los forúnculos deben ser tratados a toda prisa con el fin de detener la propagación de las bacterias a otras partes del cuerpo y que no causen infecciones secundarias como consecuencia de ello.
Una infección muy común que se suele asociar con forúnculos se llama celulitis. Se produce en las capas más profundas de la piel y debe ser tratada con antibióticos.
Algunas otras infecciones secundarias incluyen infecciones de las articulaciones, el revestimiento del corazón, e infecciones de la sangre, por lo general se hace referencia como envenenamiento de la sangre.
Todas estas condiciones pueden ser potencialmente muy graves y será necesaria una estancia en el hospital, con antibióticos por vía intravenosa.
Los furúnculos suelen estar causados por folículos pilosos que están infectados por bacterias, que normalmente viven en la piel o en el interior de la garganta y la nariz.
La piel protege al cuerpo de bacterias, pero a veces las bacterias se cuelan a través de cortes y raspaduras en la piel o a través de los pequeños orificios en la piel donde crece el pelo, los llamados folículos.
Una vez que la bacteria infecta la piel, la respuesta del sistema de defensa del cuerpo será enviar a las células blancas de la sangre para matar la infección. Esta combinación de bacterias muertas, glóbulos blancos muertos, y las células muertas de la piel hacen hervir. Estos tres ingredientes juntos forman lo que la mayoría conoce como pus.
Las personas que tienen diabetes tienen un mayor riesgo de forúnculos, al igual que las personas con sistemas inmunes debilitados como resultado de infecciones por el VIH, o esteroides y quimioterapia. Las personas que ya tienen problemas de la piel, como el acné, también son más susceptibles a los forúnculos.
Un médico será capaz de diagnosticar un hervor con sólo mirarlo. Si una persona ya está tomando antibióticos y la hierve siguen regresando, entonces serán necesarias más pruebas. El médico suele tomar un hisopo de algodón del tejido y observarlo bajo un microscopio.
La mejor manera de evitar que hierva, es lavar la piel con regularidad con jabón anti-bacteriano que es suave y limpia a fondo todos los cortes, no importa lo pequeño que sea. Además, una vez que los recortes están limpios, deben mantenerse cubiertos con vendajes hasta que se curen, con el fin de reducir el riesgo de infección.
Una dieta saludable también ayudará al ejercicio regular. En general, todo lo que ayuda a mejorar el sistema inmunológico es un buen método para prevenir los forúnculos e infecciones que resultan de ellas.
Como se mencionó anteriormente, las únicas complicaciones reales de forúnculos, son el resultado de infecciones que resultan de no tratar los forúnculos correctamente.