La diarrea no es realmente una enfermedad, pero es una condición en la cual una persona tiene tres o más deposiciones acuosas o blandas al día. La diarrea se considera que es un síntoma de alguna infección.
La diarrea puede ser aguda o crónica. Si la diarrea aguda aparece de repente no es muy grave, pero cuando tiene una duración de más de dos semanas, se hace crónica, y es resultado de, por ejemplo, una enfermedad inflamatoria intestinal o síndrome de intestino irritable. Las causas más frecuentes de diarrea incluyen virus, bacterias, parásitos y muchos medicamentos. Otras causas son la lactosa, fructosa, edulcorantes artificiales, y azucarados.
Los síntomas más comunes que acompañan a la diarrea son calambres abdominales o dolor de estómago, estreñimiento alternando, una necesidad urgente de ir al baño, y la incapacidad para controlar los intestinos. Otros signos, como distensión abdominal, náuseas, fiebre, vómitos, y el frío, también son propensos a aparecer. Moco y sangre en las heces o heces acuosas, y sueltas, son frecuentes, por otra parte. Por lo general, la persona que sufre de diarrea puede sentirse mal del estómago o dolor en los músculos y articulaciones. El dolor de cabeza es también uno de los síntomas que van junto con la diarrea.
Como ya hemos mencionado, la diarrea no es una enfermedad y no se considera generalmente como un trastorno grave, pero hay varios casos en los que puede ser peligroso, y es muy importante visitar al médico. Si la persona tiene diarrea por más de tres días y tiene la temperatura alta, o dolor severo en el abdomen o en el recto, se debe consultar al médico. Otro caso en el que se necesita la ayuda médica o al menos consejo, es cuando la persona tiene taburetes con sangre o negros. La diarrea puede causar deshidratación y, en tal caso, los suspiros típicos sería sequedad en la boca o la piel, sed excesiva, micción y poca orina de color oscuro, acompañado de debilidad y mareos. En los niños la diarrea se debe informar al médico.
Dado que la diarrea aguda no es grave para la salud de la persona que la padece, por lo general no se trata, ya que nuestro sistema inmune es lo suficientemente fuerte como para luchar solo. Hay algunas cosas que podemos hacer con el fin de aliviar los síntomas. Como la diarrea a menudo causa deshidratación, es muy recomendable beber tanta agua u otros líquidos como podamos. El médico puede prescribir algunas bebidas de rehidratación que regulan el nivel de agua, la sal y el azúcar en el cuerpo. Comer una gran cantidad es también recomendable. Hay algunos medicamentos contra la diarrea que pueden aliviar los síntomas tales como amida de Lope, pero no se deben utilizar en niños, o si la persona tiene una alta temperatura o tiene sangre en las heces. Si aparecen dolor de cabeza o fiebre, el ibuprofeno y paracetamol pueden ser muy eficaces.