¿Qué es un dedo en martillo? Un dedo en martillo se refiere a una situación en la que el medio del dedo del pie se ha elevado o doblado hacia arriba, por lo que se asemeja a un martillo. La mayoría de las personas que sufren de dedo en martillo también tienen alguna otra afección que afecta los dedos de los pies. La parte elevada del dedo del pie entra en contacto frecuente con los zapatos y puede tener forma de callos en la parte superior.
¿Cuándo se indica la cirugía para el dedo en martillo?
El primer intento de médicos y pacientes es controlar esta condición sin recurrir a la cirugía. Esto incluirá el uso de zapatos especializados que tengan un espacio adicional para la parte elevada, incluido el relleno, para evitar la fricción excesiva y la fuerza que se transfiere, así como la aplicación de una cinta adhesiva en el dedo para tratar de mantenerlo en su posición.
Si estas medidas no pueden proporcionar comodidad al paciente y permiten actividades normales sin dolor, entonces se puede considerar una opción quirúrgica. El dolor constante y razonablemente severo en el dedo afectado también se trata como una de las indicaciones directas para la cirugía de dedo en martillo.
Contraindicaciones absolutas para la cirugía de dedo en martillo
Los pacientes que sufren una infección activa en el área o que no están en condiciones médicas suficientes para someterse al procedimiento deben evitar la cirugía de dedo en martillo. A las personas cuya única queja es de naturaleza cosmética tampoco se les debe recomendar la cirugía de dedo, ya que el objetivo principal de este procedimiento es aliviar el dolor y facilitar el uso normal de los pies, no para mejorar el aspecto cosmético.
¿Cómo se lleva a cabo la cirugía de dedo en martillo?
El tipo de procedimiento que se está llevando a cabo dependerá del tipo particular si el dedo en martillo ha sido diagnosticado. Los dedos en martillo pueden ser flexibles o fijos.
Para un dedo en martillo flexible, el cirujano puede llevar a cabo un procedimiento de transferencia de tendón en el que se intente que los dedos de los pies vuelvan a su posición estirando los tendones unidos.
Para un dedo en martillo fijo, el procedimiento más común implica una extracción quirúrgica de los extremos del hueso para enderezar el dedo y luego fijarlo en posición mediante el uso de pasadores quirúrgicos. También se puede llevar a cabo un proceso de fusión que consiste en cortar los extremos del hueso, utilizando injertos óseos y técnicas de estabilización mediante el uso de implantes o clavos para finalmente enderezar el dedo.
Este procedimiento generalmente se lleva a cabo como un procedimiento ambulatorio y el paciente puede irse a casa el mismo día.
Después de la cirugía de dedo en martillo
Los pacientes deben usar calzado especializado después de la cirugía y descansar en la cama durante un período de tiempo específico. El pie operado debe mantenerse al nivel del corazón durante la primera semana para garantizar la máxima circulación sanguínea en el área.
Generalmente, las suturas se quitan después de unas semanas y los clavos que se hayan colocado también se quitan dentro de las tres o cuatro semanas posteriores a la cirugía.
La extracción de estos pasadores es relativamente sin dolor y se puede llevar a cabo bajo anestesia local. El paciente no tiene ninguna molestia prolongada de esta parte del procedimiento.
Lo más probable es que el médico también aconseje al paciente que realice ciertos ejercicios de estiramiento para que se pueda desarrollar un rango de movimiento adecuado.