El reflujo laringofaríngeo es una afección que se desarrolla en personas a las que se les diagnostica reflujo gastroesofágico (ERGE). Lo que sucede es que el ácido del estómago fluye de regreso al esófago y cuando llega a la garganta, causando síntomas y patología, entonces esto es reflujo laringofaríngeo.
Síntomas
La mitad de los pacientes con reflujo laringofaríngeo no presenta ningún signo o síntoma de malestar estomacal o acidez estomacal. Quienes son diagnosticados con reflujo laringofaríngeo muestran signos y síntomas que se relacionan con sensaciones en la garganta e incluyen:
- Una necesidad constante de aclarar la garganta.
- Tos crónica.
- Ronquera leve.
- Dificultad para tragar
- Dolor de garganta.
- Goteo postnasal.
- La sensación de un nudo en la garganta.
- Se siente como que la mucosa se adhiere a la garganta.
- La faringe roja e hinchada o irritada.
Factores de riesgo
Desafortunadamente, cualquiera puede obtener reflujo laringofaríngeo pero hay quienes son propensos a esta condición, e incluyen los siguientes factores:
- Edad avanzada.
- Ciertos hábitos alimenticios.
- Personas que siempre usan ropa ajustada.
- Personas con sobrepeso.
- Aumento de los factores estresantes físicos y / o emocionales.
Diagnóstico
El diagnóstico de reflujo laringofaríngeo se realiza en el examen clínico. Un paciente que se conoce con ERGE tendrá hinchazón o irritación en la garganta, más específicamente en la parte posterior de la faringe (caja de la voz). Por lo tanto, no se necesitan más investigaciones la mayor parte del tiempo para confirmar el diagnóstico.
Si el diagnóstico no es claro, se pueden realizar más investigaciones, que incluyen mirar directamente al estómago y el esófago haciendo una gastroscopia, un estudio de deglución de bario para ver el movimiento de los alimentos y una prueba de pH para determinar el nivel de acidez en la garganta.
Complicaciones
Si reflujo laringofaríngeo no se trata de manera óptima o si no se trata, esto puede ocasionar los siguientes problemas:
- Hinchazón de las cuerdas vocales.
- Tos crónica.
- Dolor de garganta.
- Úlceras abiertas en las cuerdas vocales.
- La formación de granulomas (masas que se forman por irritación crónica) en la garganta.
- Empeoramiento de asma, bronquitis o enfisema en aquellos a los que se les diagnostican estas afecciones.
- Posible desarrollo de cáncer de faringe
Administración
Los siguientes son métodos de prevención y tratamiento usados para manejar el reflujo laringofaríngeo.
- Coma una dieta blanda que consiste en bajos niveles de ácido, es baja en grasa y no picante.
- Coma comidas pequeñas con mayor frecuencia en lugar de un par de comidas grandes.
- No coma alimentos menos de 2 horas antes de acostarse.
- Pierda peso ya que esto ayudará a reducir la presión intraabdominal y, por lo tanto, reducirá las posibilidades de reflujo.
- Si es posible, trate de evitar aclarar la garganta demasiadas veces.
- Evite el uso de cafeína, productos de tabaco y alcohol ya que estimulan la producción de ácido en el estómago.
- Intente levantar la cabecera de la cama o coloque un objeto fuerte y sólido debajo de la parte superior del colchón. Esto ayudará a elevar ligeramente la cabeza para que el ácido del estómago no fluya fácilmente por el esófago y, por lo tanto, irrite la garganta.
- Intente usar medicamentos de venta libre, como antiácidos o reductores de ácido estomacal (ranitidina), así como inhibidores de la bomba de protones (IBP, omeprazol, esomeprazol y pantoprazol). Los IBP deben prescribirse, por lo que deberá consultar con su médico de atención primaria con respecto al uso de este medicamento.
- La intervención quirúrgica puede ser necesaria si el caso es grave.