La coenzima Q10 (CoQ10) es una sustancia similar a la vitamina que normalmente produce el cuerpo y es esencial para el funcionamiento de varias células y tejidos. Se observa que los niveles de CoQ10 disminuyen a medida que avanza la edad.

Los niveles de esta coenzima son bajos en individuos que padecen trastornos como la enfermedad de Parkinson, trastornos cardíacos, diabetes, cáncer y VIH / SIDA. Se cree que la suplementación de CoQ10 beneficia a las personas que padecen dichos trastornos y también se informa que es útil en la prevención de estos trastornos. Además de su función antioxidante, varios estudios informaron sobre los beneficios de CoQ10 en el sistema inmune.
Impulso de la función inmune
Los estudios han informado sobre los efectos beneficiosos de la administración de suplementos de coenzima Q10 en la prevención de infecciones y cánceres. Muchos trastornos, incluidas las infecciones y los cánceres, están relacionados principalmente con el funcionamiento anormal del sistema inmunitario. Se requiere la regulación apropiada del sistema inmune para el inicio de la respuesta inmune y las respuestas anormales de control. Numerosas sustancias, incluida la CoQ10, tienen un papel en la regulación del sistema inmune y los niveles adecuados de estas sustancias son muy necesarios.
Se observó que la administración de CoQ10 con o sin vitamina B6 aumenta los niveles en sangre de diferentes tipos de linfocitos T. Estos linfocitos son necesarios para matar microorganismos dañinos y eliminar las sustancias tóxicas. Se informaron otros efectos sobre la tasa de fagocitosis, los niveles de anticuerpos en la sangre y la reducción en el número de infecciones.
Se observa que los individuos que padecen trastornos del sistema inmune tales como el SIDA padecen deficiencia o funcionamiento anormal de los diferentes tipos de linfocitos T y sus células y proteínas asociadas. Se observó que la suplementación de CoQ10 en sujetos normales aumenta la relación de diferentes células T que pueden tener un papel beneficioso en individuos que sufren deficiencias relacionadas con el sistema inmune. Se están realizando más estudios para demostrar la eficacia de la CoQ10 en la desaceleración de la progresión de los trastornos inmunes. Otro estudio realizado en la Universidad de Texas señaló que las personas que padecen alergias tienen niveles muy bajos de CoQ10 que confirman su papel en el sistema inmune. La suplementación de CoQ10 junto con otros medicamentos en tales individuos puede mejorar la respuesta inmune y dar como resultado una disminución de los síntomas alérgicos.