El aceite o el sebo es un producto natural de las glándulas sebáceas que rodean los folículos pilosos en la piel.
Esto mantiene la piel suave, flexible y de aspecto más joven. Sin embargo, algunas personas producen más aceite que otras o más de lo necesario sólo para mantener la piel saludable, lo que resulta en una piel con problemas de acné grasiento.
La piel grasa en la cara por lo general comienza en la pubertad o adolescencia, años en los que la piel produce más petróleo, ya que los niveles hormonales aumentan durante este período. Las fluctuaciones hormonales también ocurren alrededor del momento de la menstruación, durante el embarazo y la menopausia. Sin embargo, otros factores tales como los antecedentes genéticos y el estrés también juegan un papel. Aunque no existe una cura para la piel grasa, hay varias formas en que puede ser controlada.
Tratamientos caseros para la piel grasa
La mejor manera de manejar su cara aceitosa es limpiarla dos veces al día utilizando un limpiador suave de la piel. Los jabones abrasivos, paños de limpieza y los aficionados a la piel pueden provocar un aumento de la producción de petróleo y el uso de estos deben ser evitados.
Si los limpiadores suaves no son eficaces para reducir el exceso de grasa facial, los dermatólogos recomiendan el uso de productos para la piel de venta libre que contienen peróxido de benzoilo, ácido glicólico, ácido salicílico o beta-hidroxiácidos. Estos también se utilizan para tratar el acné, que es común en las personas con piel grasa.
La mayoría de las personas tienen una combinación de piel seca y grasa en diversas áreas de su cara. En lugar de utilizar tónicos para la piel en toda la cara, es mejor aplicar estos, sólo en las zonas grasas de la cara, como la nariz, la frente y la barbilla.
Use almohadillas medicadas que contienen ácido salicílico o ácido glicólico para refrescar la piel durante el día. Los papeles secantes son también útiles en la eliminación de la grasa facial y no se secan la piel. Borrar el aceite de la nariz, la barbilla y la frente presionando el papel cosmético fino sobre la piel durante varios segundos.
Las máscaras faciales ayudan a reducir el aceite y limpiar los poros, pero deben utilizarse con moderación para evitar el exceso de secar la piel. Use una crema hidratante sin aceite para mantener la humedad de la piel adecuada y sin el brillo grasiento.
No se olvide de usar protector solar libre de aceite para proteger la piel de los dañinos rayos ultravioleta (UV) del sol.
Adapte su régimen de cuidado de la piel para la temporada. En verano, la piel puede estar sudorosa y aceitosa, por lo que se aconseja limpiar todos los días con un producto que contenga ácido glicólico para mejorar su piel. Sin embargo, en invierno, el uso de estos productos debe ser reducido para evitar el exceso de secar la piel.
El tratamiento médico de la cara aceitosa
Si no está satisfecho por los efectos de productos para la piel de venta libre, consulte con un dermatólogo para su asesoramiento en relación con el uso de cremas que contienen la prescripción-fuerza adapaleno, tretinoína, o tazaroteno. El médico también puede recomendarle otros tratamientos de la piel tales como los peelings químicos y láser para reducir el exceso de grasa facial y para mejorar la apariencia general de la piel.