Las amígdalas son dos pequeños ganglios linfáticos ubicados a ambos lados de la parte posterior de la garganta. Al igual que con otros ganglios linfáticos, forman parte del sistema inmune. Su trabajo es evitar que los virus y las bacterias ingresen al cuerpo a través de la nariz y la boca.
A veces, sin embargo, los virus y las bacterias logran infectar las amígdalas. Una infección hace que las amígdalas se irriten e inflamen. Los médicos llaman inflamación de las amígdalas amigdalitis .
La amigdalitis generalmente afecta a niños mayores de 2 años y rara vez afecta a adultos. Según la Biblioteca Nacional de Medicina, la amigdalitis es una enfermedad infantil tan común que cada niño la experimenta al menos una vez.
Este artículo describe cómo pueden propagarse las bacterias y los virus que causan la amigdalitis. También describimos los síntomas de la amigdalitis, su tratamiento y los pasos de prevención que las personas pueden tomar.
¿Qué encontrarás aquí?
¿Es contagiosa la amigdalitis?
La amigdalitis es la respuesta inflamatoria del cuerpo a una infección de las amígdalas. La amigdalitis en sí no es, por lo tanto, contagiosa.
Los virus y bacterias que causan amigdalitis, sin embargo, son contagiosos.
En consecuencia, la forma más efectiva de detener la propagación de la amigdalitis es detener la propagación de los patógenos que la causan.
Cómo se propaga y la ciencia detrás de esto
La amigdalitis puede ocurrir como resultado de una infección bacteriana o viral.
Amigdalitis bacteriana
Una de las principales causas bacterianas de la amigdalitis es la infección por estreptococos beta-hemolíticos del grupo A (GABHS), que los médicos suelen inyectar al estreptococo del grupo A (GA).
El estreptococo GA es la bacteria responsable de la faringitis estreptocócica. Según una revisión, el estreptococo GA es responsable del 15-30% de los dolores de garganta en niños y del 5 al 15% de los dolores de garganta en adultos.
El estreptococo de GA se propaga cuando una persona tiene contacto directo con la saliva o la mucosidad de alguien que ya tiene la infección. Esto incluye respirar gotitas llenas de bacterias del aire.
Las bacterias se propagan más rápidamente en lugares donde las personas, especialmente los niños, están muy cerca. Los ejemplos incluyen escuelas y guarderías.
El estreptococo GA generalmente comienza a causar síntomas entre 2 y 5 días después de que la bacteria haya infectado a alguien.
Los virus que causan el resfriado común y la gripe también pueden causar amigdalitis. Estos virus pueden vivir en superficies, como los teclados de las computadoras y los pomos de las puertas, durante horas. Esta resistencia les ayuda a extenderse.
Signos y síntomas más comunes de la amigdalitis
La mayoría de las veces, la amigdalitis se desarrolla muy rápidamente. Los signos y síntomas más comunes de la amigdalitis son:
- sensación de carne viva, dolorida o con picazón
- amígdalas rojas e hinchadas con manchas blancas
- ganglios linfáticos agrandados y sensibles en el cuello
- dificultad para tragar o dolor al tragar
- respirar y dormir con la boca abierta
- mal aliento
- fiebre
- deshidratación
- dolor de cabeza
- fatiga
- dolor de estómago
Algunos niños pueden desarrollar amigdalitis crónica o recurrente donde experimentan al menos cinco episodios de amigdalitis en un año .
Causas más comunes de la amigdalitis
En niños menores de 5 años, la causa de la amigdalitis suele ser viral. En niños entre las edades de 5 y 15 años, la causa suele ser bacteriana.
Hasta el 70% de los casos agudos de amigdalitis son causados por uno de los siguientes virus:
- adenovirus
- coronavirus
- citomegalovirus
- enterovirus
- Virus de Epstein-Barr (VEB)
- virus de la gripe
- VIH
- virus del sarampión
- rinovirus
Tratamiento para la amigdalitis
Determinar si la amigdalitis de una persona se debe a un virus o una bacteria es un paso esencial para proporcionar un tratamiento efectivo.
Los síntomas de la amigdalitis generalmente desaparecen en 1-2 semanas. Durante este tiempo, una persona puede beneficiarse de los siguientes tratamientos caseros:
- descanso
- beber muchos líquidos
- manejo del dolor con pastillas para la garganta y remedios de venta libre (OTC)
Las personas que tienen amigdalitis bacteriana requerirán tratamiento con antibióticos. Los antibióticos ayudan a acelerar la recuperación y a reducir el riesgo de fiebre reumática y otras posibles complicaciones de la amigdalitis bacteriana.
Prevención
La mejor manera de evitar la amigdalitis es prevenir la propagación de virus y bacterias que causan la infección. Los profesionales de la salud recomiendan:
- lavarse las manos con frecuencia
- usar desinfectante para manos si no es posible lavarse las manos
- evitar tocarse la cara con las manos sin lavar
- enseñar a los niños a taparse la boca y la nariz cuando tosen o estornudan
- mantener a los niños enfermos fuera de la escuela hasta que la fiebre haya desaparecido o hayan recibido antibióticos durante al menos 24 horas
- Asegurarse de que las personas que están enfermas no compartan alimentos, bebidas o toallas con personas que no están enfermas.
- desinfectar superficies en espacios compartidos
- reemplazar el cepillo de dientes de una persona después de haberse recuperado de la amigdalitis
Es importante mantener buenas prácticas de higiene incluso cuando nadie parece estar enfermo. Esto se debe a que la mayoría de las personas son contagiosas antes de desarrollar síntomas.
Resumen
La amigdalitis se desarrolla cuando una infección causa inflamación, irritación e hinchazón en las amígdalas. Es mucho más común entre niños que adultos. De hecho, casi todos los niños han tenido amigdalitis al menos una vez.
La amigdalitis en sí no es contagiosa, pero los virus y las bacterias que la causan son contagiosos. Hay muchas precauciones que las personas pueden tomar para ayudar a prevenir la propagación de patógenos que causan amigdalitis. Los ejemplos incluyen practicar una buena higiene, contener la tos y los estornudos, y evitar el contacto cercano con personas enfermas.