Junto con las náuseas, la fatiga y los pies hinchados, la mayoría de las mujeres experimentan dolor de espalda en algunos puntos durante el embarazo. El dolor de espalda relacionado con el embarazo típicamente afecta la espalda baja.
Según una revisión que analizó la queja, el dolor lumbar afecta a más de dos tercios de las mujeres durante el embarazo.
El dolor de espalda también puede surgir cerca del centro de la espalda cuando los médicos lo llaman dolor lumbar, o el coxis cuando se refieren a él como dolor pélvico posterior.
Muchos factores, incluidos los cambios hormonales y posturales, contribuyen al dolor de espalda durante el embarazo. Las causas varían entre las mujeres y pueden depender de la etapa del embarazo.
Este artículo analiza los motivos del dolor de espalda relacionado con el embarazo y las formas de tratar y prevenir este malestar.
¿Qué encontrarás aquí?
Causas en el primer trimestre
Los factores que pueden provocar dolor de espalda durante el primer trimestre incluyen cambios hormonales y estrés, como veremos a continuación.
Cambios hormonales
Durante el primer trimestre, los niveles de progesterona en el cuerpo aumentan rápidamente. Los niveles altos de esta hormona ayudan a relajar los músculos y los ligamentos cerca de la pelvis, lo que puede afectar la estabilidad y la alineación de las articulaciones.
Otra hormona que los médicos llaman relaxina ayuda al óvulo a implantarse en la pared del útero y también previene las contracciones durante las primeras etapas del embarazo. A medida que se acerca el parto, la relaxina estimula el cuello uterino para que se ablande y se abra en preparación para el parto.
Además, la relaxina relaja los ligamentos y las articulaciones en la región pélvica para que el canal del parto pueda expandirse durante el parto.
Finalmente, la relaxina afecta los ligamentos que estabilizan la columna vertebral, lo que puede causar inestabilidad, cambios posturales y dolor lumbar.
Estrés
Aunque muchos consideran el embarazo como un evento emocionante en la vida lleno de cambios, también introduce nuevas fuentes de estrés.
El estrés afecta más que el estado de ánimo o el estado psicológico de una persona. El estrés puede causar síntomas físicos, como fatiga, dolores de cabeza, rigidez y dolor muscular.
Causas en el segundo y tercer trimestres
Durante el segundo y tercer trimestres, el útero continúa expandiéndose a medida que el feto crece rápidamente.
Los cambios posturales, el aumento de peso y la separación muscular contribuyen al dolor de espalda en las últimas etapas de los embarazos, como veremos a continuación:
Inclinándose hacia atrás
El centro de gravedad de una mujer se desplaza hacia la parte frontal del cuerpo a medida que el bebé aumenta de peso.
Algunas mujeres pueden inclinarse hacia atrás para recuperar el equilibrio. Inclinarse hacia atrás ejerce una presión adicional sobre los músculos de la espalda que pueden provocar dolor lumbar y rigidez muscular.
Aumento de peso
El peso que una persona gana durante el embarazo puede contribuir a la espalda baja y al dolor en las articulaciones.
La cantidad de peso que una mujer aumenta durante el embarazo puede afectar su salud general y la de su bebé.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que las mujeres que tienen un solo feto aumenten la siguiente cantidad de peso, de acuerdo con su peso previo al embarazo:
- 28–40 libras (libras) si tiene bajo peso
- 25–35 libras si un peso saludable
- 15–25 libras si tiene sobrepeso
- 11-20 libras si es obeso
Separación muscular
El abdomen consta de dos bandas paralelas de músculos que se conectan en la mitad del abdomen. Estos músculos ayudan a estabilizar la columna vertebral y apoyan la espalda.
Durante el embarazo, el feto en crecimiento empuja contra los músculos abdominales, lo que hace que se estiren y, en algunos casos, se separen. Esta presión puede dar lugar a una condición llamada diastasis recti.
Durante el segundo y tercer trimestre, algunas mujeres pueden desarrollar una protuberancia o «perro» en el estómago. Esta es una señal de que sus músculos abdominales se están separando para dejar espacio para el crecimiento del útero.
A medida que los músculos abdominales se estiran, se debilitan. Esto puede aumentar el riesgo de una mujer de lesionarse la espalda o desarrollar dolor lumbar o pélvico.
Como aliviar el dolor
A veces, puede parecer que el dolor de espalda es inevitable durante el embarazo. Sin embargo, hay formas de aliviar el dolor de espalda durante y después del embarazo.
Las formas de aliviar el dolor de espalda durante el embarazo incluyen:
- Estirar la espalda baja de forma regular.
- Dormir de lado con una almohada entre las piernas y debajo del abdomen.
- Usar una compresa tibia para relajar los músculos tensos o reducir la inflamación.
- Hacer cambios posturales, como pararse y sentarse derecho, de modo que la espalda sea recta y los hombros derechos.
- Usar un cinturón de maternidad para apoyo abdominal adicional y para la espalda.
- Usar una almohada lumbar para un respaldo adicional mientras está sentado.
- Obtener masajes prenatales para relajar los músculos tensos, mejorar el rango de movimiento y aliviar el estrés.
- Utilizar tratamientos alternativos, como servicios de acupuntura y quiroprácticos, con un profesional que se especialice en el embarazo.
- Reducir el estrés a través de la meditación, el yoga prenatal y otras técnicas de atención plena.
- Dormir lo suficiente.
Consejos para prevenir y evitar el dolor.
Existen varias formas efectivas de evitar el dolor de espalda durante el embarazo, que incluyen:
- Fortalecer los músculos de la espalda con ejercicios amigables con el embarazo.
- Mantener un peso saludable durante todo el embarazo.
- Hacer ejercicio suave con regularidad, con la aprobación de un médico.
- Usar zapatos planos o de tacón bajo con soportes de arco.
- Evitar estar de pie por largos periodos.
- Evitando levantar demasiado peso.
- Practicar técnicas adecuadas de levantamiento al agacharse y usar las piernas en lugar de la espalda.
- Practicar la buena postura.
- Evitar dormir sobre el abdomen.
Cuando ver a un doctor
Las mujeres que experimentan dolor de espalda durante el embarazo deben comunicarse con su obstetra u otro profesional de la salud si experimentan los siguientes síntomas:
- Dolor severo.
- Dolor que dura más de 2 semanas.
- Calambres que ocurren a intervalos regulares y se intensifican gradualmente.
- Dificultad o dolor al orinar.
- Sensación de hormigueo en las extremidades.
- Sangrado vaginal.
- Flujo vaginal irregular.
- Fiebre
La ciática se produce como resultado de una lesión o irritación del nervio ciático. La ciática durante el embarazo se produce cuando el feto en crecimiento ejerce presión sobre el nervio ciático.
Un síntoma de la ciática es el dolor lumbar que se irradia a través de las nalgas y hacia abajo de la pierna.
Las mujeres que sufren de dolor de espalda severo que persiste por más de 2 semanas deben consultar las opciones de tratamiento con su proveedor de atención médica.
Las mujeres embarazadas deben hablar con su proveedor de atención médica antes de comenzar con nuevos medicamentos, suplementos o tratamientos naturopáticos.
Conclusión
El dolor de espalda es una parte común del embarazo. Varios factores pueden causar dolor de espalda durante el embarazo, incluyendo:
- Aumento en los niveles hormonales.
- Cambios posturales.
- Aumento de peso.
- Separación muscular.
- Estrés en el cuerpo
El dolor de espalda relacionado con el embarazo generalmente se resuelve por sí solo después de dar a luz. El dolor de espalda severo que dura más de 2 semanas puede requerir tratamiento médico o terapia física.
Las mujeres deben hablar con su proveedor de atención médica antes de comenzar con nuevos medicamentos o tratamientos mientras están embarazadas.