Las palpitaciones del corazón representan una experiencia subjetiva del ritmo cardíaco irregular, que también se llama arritmia. Existen varios tipos diferentes de arritmia, dependiendo de la región del músculo cardíaco que produce impulsos irregulares.
Los problemas de ansiedad, especialmente los ataques de pánico, durante mucho tiempo se han considerado relacionados con el desarrollo de arritmias cardíacas. Sin embargo, todavía hay un debate entre los científicos sobre la relación causal entre estos dos temas. Aquí discutimos algunas de las características más importantes de esta complicada relación.
¿Qué es la ansiedad?
En primer lugar, el término ansiedad se usa muy a menudo para describir una sensación de incomoda o malestar en situaciones específicas. Sin embargo, esto es en la mayoría de los casos un término exagerado. En otras palabras, no todos los que se ponen un poco nerviosos tienen problemas de ansiedad. Solo las personas a las que se les impide realizar actividades diarias debido a la ansiedad pueden incluirse en esta categoría.
La ansiedad es un gran grupo de trastornos neuróticos que van desde la ansiedad social y los ataques de pánico a las fobias graves. Para cada tipo de ansiedad, existen criterios de diagnóstico establecidos y solo un psiquiatra capacitado puede realizar dicho diagnóstico.
Cómo la ansiedad afecta la función cardíaca
En algunas formas de ansiedad, como los ataques de pánico, las personas también tienen algunos síntomas somáticos, además de problemas psicológicos puros. Una de las quejas más comunes es una frecuencia cardíaca elevada. El mecanismo por el cual dichos ataques afectan la función cardíaca es el mismo que el presente en el miedo, la ira o la actividad física intensa. En estas situaciones, se activa el sistema nervioso simpático, que produce la llamada respuesta de «lucha o huida». Las manifestaciones incluyen pupilas dilatadas, respiración profunda, aumento del flujo sanguíneo a través de los músculos y ritmo cardíaco elevado. Normalmente, cuando existe la verdadera razón de tal reacción, estas manifestaciones solo duran hasta que se elimina el peligro. Por otro lado, en personas con ansiedad, los síntomas pueden persistir durante un período de tiempo más largo, lo que puede causar un ritmo cardíaco irregular.
Los ataques de pánico y las palpitaciones del corazón conforman algo así como un círculo vicioso, ya que la persona afectada se vuelve hipersensible y persistentemente temerosa a la espera de la nueva palpitación.
Relación causativa entre la ansiedad y las palpitaciones del corazón
Los científicos aún están debatiendo lo que ocurre primero: problemas de ansiedad o palpitaciones cardíacas. Hay buenas bases para ambos escenarios. La ansiedad puede estimular a una persona a centrarse demasiado en cuestiones corporales, especialmente aquellas que no pueden controlarse conscientemente, como el ritmo cardíaco. Por otro lado, las palpitaciones frecuentes pueden producir problemas psicológicos que conducen a la depresión o la ansiedad. Más estudios aleatorios son ciertamente necesarios para desarrollar la conclusión correcta.
Posibles opciones de tratamiento
En todas las personas que se quejan de palpitaciones del corazón, se requiere un registro de ECG. En algunos casos, su médico puede recomendarle una grabación Holter-ECG de 24 horas para rastrear su ritmo cardíaco durante 24 horas. Hay diferentes tipos de medicamentos antiarrítmicos disponibles para diferentes tipos de arritmias. Si los trastornos del ritmo cardíaco se relacionan con situaciones estresantes, también se requiere un examen psiquiátrico.
Los problemas de ansiedad se tratan con mayor frecuencia con una combinación de antidepresivos y ansiolíticos benzodiazepínicos (siempre tras prescripción médica). A veces, la terapia cognitiva conductual también es necesaria.