Todos los alimentos proporcionan energía en forma de calorías, pero eso no significa que afecten sus niveles de energía de la misma manera. Los dulces azucarados, por ejemplo, desencadenan oleadas de energía rápidas. Sin embargo, debido a que tienen un impacto significativo en su nivel de azúcar en la sangre, es más probable que se bloquee rápidamente. Comer una variedad de alimentos nutritivos como parte de una dieta equilibrada y adecuada en calorías puede ayudar a garantizar que se cumplan sus necesidades de energía y nutrientes. Para obtener los mejores resultados, busque orientación de un dietista.
Frutas y vegetales
La mayoría de las frutas y verduras frescas tienen un índice glucémico bajo, que es una medida de cómo los alimentos afectan el nivel de azúcar en la sangre. Un número menor indica que los alimentos tienen un efecto leve sobre el azúcar en la sangre. Las verduras también proporcionan cantidades saludables de antioxidantes. Comer alimentos ricos en antioxidantes, como la vitamina C y el betacaroteno, es un paso útil para mejorar su estado de ánimo y la función cerebral, lo que contribuye a sentirse con energía. Las frutas y verduras ricas en antioxidantes incluyen bayas, frutas cítricas, pimientos, verduras de hoja verde, zanahorias, tomates y batatas.
Granos enteros
A diferencia de los granos refinados, los granos integrales no han sido despojados de un valioso contenido de nutrientes, incluyendo fibra y antioxidantes. Como resultado, los granos integrales tienen un menor impacto glucémico y promueven niveles de energía positivos y duraderos entre las comidas. Los granos integrales también son algunas de las fuentes más nutritivas de carbohidratos, que son la principal fuente de energía de tu cuerpo y del cerebro. Se recomienda comer granos enteros y otros alimentos ricos en carbohidratos antes de ejercitarse e inmediatamente después del ejercicio intenso para recuperar la energía y protegerse contra la fatiga. Los alimentos integrales nutritivos incluyen avena, panes y cereales 100 por ciento integrales, palomitas de maíz, arroz integral, y quinoa.
Pescado grasos
Los pescados grasos, como el salmón, la caballa, la trucha, el fletán y las sardinas, contienen una gran cantidad de ácidos grasos omega-3, grasas que su cuerpo necesita y que debe obtener de los alimentos. Las grasas omega-3 juegan un papel importante en la función cerebral, el estado de ánimo y la energía en general. El consumo de muy pocos omega-3 puede causar fatiga y cambios de humor.
Nueces y semillas
Las nueces y las semillas también son ricas en antioxidantes y grasas saludables. Para aumentar su consumo, agregue semillas de linaza o nueces molidas a sus comidas y meriendas. Se recomienda reducir los aperitivos procesados, como pasteles y bagels blancos, y meriendas en alimentos integrales, como pan integral cubierto con mantequilla de maní o cereal entero cubierto con nueces o semillas. Las almendras, los cacahuetes, las nueces de Brasil, las semillas de girasol y las semillas de calabaza están repletas de antioxidantes.