Una persona puede experimentar episodios de vértigo inmediatamente después de comer o un par de horas después. Diferentes situaciones pueden llevar a que se observe un marco de tiempo diferente. Hay un par de causas de esta situación donde se pueden seguir medidas conservadoras para ayudar a resolver este problema.
Las dos condiciones principales que están asociadas con causar mareos después de comer incluyen hipotensión posprandial e hipoglucemia reactiva.
Hipotensión postprandial
La hipotensión postprandial se define como una caída en la presión arterial después de comer y puede ocurrir en cuestión de minutos. Después de que se consume una comida, la frecuencia cardíaca aumenta y la sangre se desvía de otras áreas del cuerpo hacia el intestino. Las arterias en las áreas periféricas del cuerpo (brazos, piernas y cabeza) se estrechan para tratar de mantener la presión sanguínea normal del cuerpo, lo que asegura que el cerebro tenga sangre y oxígeno durante este tiempo.
Ahora, debido a factores genéticos que afectarían a las personas más jóvenes y debido a los cambios de las arterias relacionadas con la edad en los ancianos, este mecanismo compensatorio no funciona tan bien. Las arterias que se supone que se estrechan no lo hacen y esto causa una caída en la presión sanguínea que puede causar los síntomas de vértigo experimentados por la persona afectada. Otros síntomas asociados también pueden incluir náuseas, visión alterada y enrojecimiento facial.
Se hacen las siguientes sugerencias para tratar de reducir las posibilidades de que ocurra hipotensión posprandial:
- Beba alrededor de 8-16 onzas / 250-500 ml de agua 15 minutos antes de una comida, ya que esto ayudará a reducir las posibilidades de que su presión arterial baje.
- Comer una comida grande provocará que una gran cantidad de sangre llegue al intestino, por lo que sería mejor cambiar de 3 comidas al día a 6-7 comidas más pequeñas durante el día.
- Los alimentos refinados, azúcares e hidratos de carbono pasan rápidamente del estómago a los intestinos, y por lo tanto, causan un flujo rápido de sangre al tracto gastrointestinal. Cambiar a alimentos de IG más bajos, como los frijoles y más proteínas, así como los productos de grano entero de digestión lenta, posiblemente ayuden a eliminar este problema.
Hipoglucemia reactiva
La hipoglucemia reactiva ocurre cuando hay un descenso en los niveles de glucosa que puede provocar síntomas de vértigo. Esta situación puede ocurrir cuando se estimula el páncreas y los niveles de insulina aumentan repentinamente, lo que hace que disminuyan los niveles de glucosa en la sangre. En esta situación, los síntomas se experimentarían de dos a cuatro horas después de comer.
Las siguientes sugerencias se realizan para controlar mejor los niveles de glucosa y para intentar evitar futuras apariciones de este problema:
- Comer comidas pequeñas y refrigerios cada 3 horas.
- Evitar o limitar el consumo de azúcar.
- Uno debe hacer ejercicio regularmente, ya que aumenta la absorción de azúcar, lo que disminuye la liberación excesiva de insulina.
- Comier una variedad de alimentos que incluyen carne, pollo, pescado o fuentes de proteínas no cárnicas como granos integrales, frutas, verduras y productos lácteos.
- Consumir alimentos ricos en fibra.
Si estas sugerencias aún no ayudan a resolver los síntomas experimentados, siempre es mejor consultar con su médico de atención primaria.
Al hacerlo, excluirá problemas como la diabetes, las alteraciones electrolíticas, problemas relacionados con la tiroides que pueden afectar el metabolismo del cuerpo y los tumores que producen insulina, como los insulinomas del páncreas.