La deshidratación es la falta de agua en el cuerpo y puede causar serias complicaciones tanto para las mascotas como para las personas.
El agua es esencial para todos los seres vivos, incluidos los perros, que dependen de la ingesta diaria adecuada de líquidos para mantener una salud adecuada. Constituye el 80 por ciento del cuerpo de su perro, disuelve sustancias naturales y antinaturales y sirve como raíz de todos sus procesos biológicos, incluida la circulación, la digestión y la eliminación de desechos.
¿Qué causa la deshidratación en los perros?
La deshidratación ocurre cuando los niveles de líquido caen a menos de lo normal. Esto se debe a una menor ingesta de agua o a una mayor pérdida de líquidos. La pérdida de líquido puede deberse a un sobrecalentamiento en climas cálidos o episodios de vómitos o diarrea, especialmente en cachorros.
¿Cuáles son los síntomas generales de la deshidratación en los perros?
- Ojos hundidos
- Letargo
- Pérdida de apetito
- Boca seca
- Depresión
¿Qué debo hacer si creo que mi perro está deshidratado?
La deshidratación puede indicar un problema subyacente grave. Si sospecha que su perro está deshidratado, llévelo a un veterinario inmediatamente. Es posible que pueda detectar la deshidratación en el hogar levantando suavemente la piel de la parte posterior del cuello de su perro o entre los omóplatos; a menos que su perro tenga un exceso de peso o tenga la espinilla, debe regresar inmediatamente a su posición normal. Si le faltan fluidos, la piel levantada puede no volver rápidamente a la normalidad. A menudo, sin embargo, los signos de deshidratación no son obvios, y solo un veterinario puede proporcionar un diagnóstico y tratamiento adecuados.
¿Hay ciertos perros propensos a la deshidratación?
Los perros con mayor riesgo de deshidratación son aquellos que padecen diversas enfermedades, como trastornos renales, cáncer y enfermedades infecciosas. Los perros ancianos y las perras gestantes o lactantes pueden ser propensos a la deshidratación, así como a los perros diabéticos cuya afección no se controla regularmente.
¿Cómo se trata la deshidratación?
Un veterinario administrará líquidos por vía intravenosa o subcutánea, y ejecutará pruebas adicionales, si es necesario, para determinar la causa subyacente de la afección.
¿Cómo puedo prevenir la deshidratación?
- Proporcione agua limpia y fresca en todo momento. Lava el cuenco de agua de tu mascota todos los días para evitar la formación de bacterias.
- Controla la ingesta de agua. En general, un perro necesita al menos una onza de agua por cada libra de peso corporal por día. Si su perro no está bebiendo una cantidad adecuada de agua, busque el consejo de un veterinario. Monitoree la ingesta de agua si se está recuperando de diarrea, vómitos u otras enfermedades.
- Compre un cuenco de agua con un fondo pesado para evitar que su perro lo golpee.
- Traiga más agua cuando viaje o haga ejercicio con su perro.
- Si nota que su mascota está bebiendo menos de lo normal, revise si tiene llagas u otros objetos extraños, como rebabas o palos.
- Evite encadenar a un perro afuera, ya que puede enredarse, lo que le impide acceder a su cuenco de agua.
- Mantenga la tapa del inodoro cerrada para interrumpir los esfuerzos de su perro para convertir el tazón, que puede ser una fuente de bacterias, en una fuente de agua.