Los gusanos son un problema persistente para los perros y algunas variaciones de este parásito pueden incluso causar problemas para las personas. Nunca podemos descartar la posibilidad de una infección de gusano durante toda la vida de su perro, por lo que es importante mantener una rutina regular de tratamiento, ya que en este caso, la prevención es la mejor cura. La mayoría de los dueños de mascotas ya sabrán que es importante que tengan a su perro desparasitado regularmente.
Existen varios tipos de gusanos que su perro puede desarrollar y son los siguientes:
Tenias
El nombre de la tenia describe su apariencia. Es largo y plano, se asemeja a la cinta. A veces se puede ver a simple vista y las piezas rotas generalmente se pueden encontrar en la materia fecal del perro o alrededor de su ano (si tienen una infestación), apareciendo de forma similar a los granos de arroz.
Los síntomas comunes de la infestación severa de la tenia son vómitos, pérdida de peso y picazón severa alrededor del ano. Como las larvas de la tenia son llevadas por las pulgas que luego son recogidas por el, esta es una razón importante para prevenir las pulgas en su perro.
Gusanos redondos
Al igual que las tenias, los gusanos redondos también se pueden ver a simple vista. Son de color blanco pálido a beige, pueden enrollarse como un resorte y pueden aparecer en las heces o el vómito de su perro. Los gusanos redondos son un tipo común de gusano que se encuentra en los perros, y en particular, en los cachorros. La razón de esto es que los cachorros pueden contraer los gusanos a través de la leche materna o incluso mientras están en el útero. Los síntomas de una infestación severa de gusanos redondos tienden a ser apariencia de panza, diarrea, vómitos y un pelaje opaco.
La especie más común de lombrices en perros es Toxocara Canis, que también puede infectar a las personas. Los niños son particularmente vulnerables, ya que los huevos pueden recogerse en suelos contaminados. Una vez ingeridos por los niños, las larvas de gusanos pueden migrar a través del cuerpo, y si llegan a los ojos, pueden causar daño a la vista. Esto resalta cuán vital es «recoger» a tu perro, y estar doblemente seguro de evitar que se transmitan gusanos en primer lugar.
Siempre es mejor prevenir las lombrices en los perros que correr el riesgo de que su perro se enferme y tenga que tratarlo. Hay una serie de medicamentos autorizados para prevenir y tratar gusanos: hable con su veterinario u otro especialista en el cuidado de mascotas para que le aconsejen qué es lo mejor para su perro y cómo usarlo.