La próstata es una glándula colocada debajo de la vejiga y una parte del tubo urinario pasa a través de ella. Solo los hombres tienen la próstata.
Su papel aún está incompletamente probado, pero se sabe que esta glándula produce una parte líquida del semen. Tiene el mismo tamaño que una castaña y comienza a crecer inmediatamente después de los 25 años.
Síntomas
El agrandamiento de la próstata es la consecuencia de la hormona sexual masculina, la testosterona (dihidrotestosterona). En algún lugar alrededor de la edad de 50 años, un hombre comienza a sentir síntomas de próstata agrandada. Se manifiestan en:
- Frecuente enuresis nocturna
- Micción lenta o retardada
- Flujo de orina débil
- Incapacidad para retrasar la micción
- Vaciado incompleto de la vejiga
- Brusquedad del flujo de orina durante el vaciado de la vejiga
- Goteo de orina, que toma los pocos segundos al final de la micción
- Micción acompañada de dolor
- Hematuria – presencia de sangre en la orina
- Retención de orina
- Micción frecuente
- Necesidad fuerte y repentina de orinar
- Incontinencia – micción incontrolada
Los síntomas aparecen gradualmente y un paciente acude al médico solo cuando estos síntomas comienzan a alterar la vida normal.
Tratamiento
Una vez que se establece el diagnóstico, puede comenzar el tratamiento. El tratamiento puede ser:
- Hormonal – grupo de medicamentos que bloquea el adrenoceptor alfa1 (floma x, x atral, cardura, etc.) y medicamentos que inhiben la 5 alfa reductasa, una enzima que se localiza en la próstata y es responsable del crecimiento de la próstata (proscar, avodart). Estos medicamentos no reducen la próstata, pero mitigan los síntomas anteriores de la próstata agrandada.
- Invasivo – microondas, láser o crioterapia (congelación).
- Quirúrgico: a través del tubo urinario mediante resección transuretral (RTU) o si la próstata es muy grande, los médicos realizan la cirugía abierta, en la cual se extirpa toda la próstata.
Se cree que la resección transuretral (RTU) es el estándar de oro en el tratamiento del agrandamiento de la próstata. La cirugía generalmente está indicada en hombres con síntomas de incontinencia, sangre en la orina, retención de orina e infecciones recurrentes del tracto urinario. Las complicaciones del tratamiento quirúrgico son muy raras, y comparten el mismo riesgo con todos los demás procedimientos quirúrgicos.
La prostatectomía abierta generalmente se realiza con anestesia general o espinal. Este procedimiento lleva mucho tiempo y requiere permanecer en el hospital de siete a diez días.
Se esta experimentando con un nuevo y parece ser un método eficaz de tratamiento de próstata agrandada con láser.
La luz láser verde fuertemente enfocada podría ser una solución para el problema de salud común entre los hombres mayores. El exceso de tejido, que causa trastornos urológicos, se elimina mediante cirugía simple gracias a este dispositivo. La cirugía no tiene efectos secundarios, que normalmente ocurren en la cirugía de próstata convencional. El procedimiento se realiza de forma ambulatoria y los pacientes pueden ser dados de alta del hospital el mismo día. La luz láser es tan fuerte que los cirujanos y las enfermeras deben usar gafas protectoras especiales.
Este procedimiento es particularmente adecuado para pacientes que no sienten mejoría después de la terapia con medicamentos, y para aquellos que por alguna razón no pueden o no quieren someterse a la cirugía tradicional con bisturí. La cirugía es tan precisa que la eliminación del tejido no afecta los nervios circundantes y otras células sensibles.