Si ha notado que su gato exhibe un comportamiento llamado presionar la cabeza, es importante visitar a su veterinario inmediatamente para determinar la causa subyacente del problema.
El presionar la cabeza es el acto compulsivo de presionar la cabeza contra una pared u otra superficie implacablemente, sin razón aparente. Es diferente al golpeteo de cabeza, un comportamiento perfectamente normal en el que un gato se frota o se golpea la cabeza contra un objeto humano o inanimado como un signo de afecto. La presión sobre la cabeza generalmente es un signo de daño al sistema nervioso, que puede ser el resultado de una serie de problemas subyacentes.
- Medicación, cirugía o dieta: el método de tratamiento para este comportamiento depende del diagnóstico del veterinario de la causa subyacente del comportamiento. El tratamiento no debe realizarse hasta que se haya alcanzado el diagnóstico.
Qué esperar en la oficina del veterinario
Para determinar la causa subyacente del comportamiento de presión de la cabeza, su veterinario probablemente realizará un examen fúndico de la retina (la capa del ojo que recibe y procesa las imágenes) y otras estructuras en la parte posterior del ojo. Esto puede revelar irregularidades en el cerebro o enfermedades infecciosas o inflamatorias.
Otras pruebas útiles incluyen medidas de presión arterial (la cantidad de presión aplicada por la sangre en las arterias) para determinar si su gato tiene presión arterial alta, y tomografía computarizada (TC) o imágenes de resonancia magnética (IRM) del cerebro.
Su veterinario también realizará análisis de sangre y un análisis de orina, que podría revelar un problema con el sistema metabólico, o ayudar a determinar si hay toxinas en el sistema.
Debe estar preparado para proporcionar un historial completo de la salud de su gato, incluso cuándo comenzaron los síntomas y qué incidentes pueden haber precedido a la condición. Asegúrese de informar a su veterinario de cualquier otro síntoma que acompañe a la presión de la cabeza. Los síntomas comunes incluyen vocalización anormal, ritmo compulsivo y círculos, cambios en el comportamiento aprendido (entrenado), convulsiones, reflejos dañados, desorientación y discapacidad visual. Estos síntomas pueden provocar problemas físicos como llagas en los pies debido a la estimulación compulsiva, o lesiones en la cara o la cabeza por presionar la cabeza contra una superficie durante un período prolongado de tiempo.
Una vez que su veterinario haya realizado las pruebas apropiadas y analizado los síntomas de su gato, él o ella hará un diagnóstico. Algunos de los problemas comunes que podrían estar causando la presión de la cabeza son:
- Enfermedad del prosencéfalo (caracterizada por daño al cerebro anterior y al tálamo (la parte de los diencéfalo que es responsable de la transmisión de los impulsos sensoriales)
- Envenenamiento tóxico
- Condiciones metabólicas o glandulares
- Un tumor primario o secundario (uno ubicado en el cerebro o en otro lugar del cuerpo)
- Una infección del sistema nervioso (como la rabia o una infección por hongos)
- Traumatismo craneoencefálico agudo (como en un accidente automovilístico)
Qué esperar en casa
Los siguientes pasos para el tratamiento y la atención dependen del diagnóstico final de su veterinario de la causa subyacente del prensado de la cabeza. Cada enfermedad o dolencia requerirá un método diferente de tratamiento. En la mayoría de los casos, su veterinario recomendará exámenes neurológicos de seguimiento para controlar el progreso de la enfermedad.
Preguntas para hacerle a tu veterinario
Con afecciones neurológicas, los síntomas que parecen no estar relacionados pueden estar relacionados entre sí. Asegúrese de preguntarle a su veterinario todos y cada uno de los comportamientos o síntomas inusuales que exhibe su gato, ya que podrían desempeñar un papel crítico al hacer el diagnóstico.
Posibles complicaciones a tener en cuenta
Hable con su veterinario si tiene alguna inquietud sobre la condición o los síntomas de su gato.