La mayoría de las mujeres embarazadas esperan van a entregar a sus hijos por vía vaginal, que es la forma más natural de la entrega de un niño. Sin embargo, no pocas veces, hay razones médicas que hacen imposible el parto vaginal y los médicos sugieren a continuación, o incluso pedir una cesárea.
Una cesárea (o cesarea) sí no es un procedimiento complicado, pero sí incluye el tiempo de recuperación significativo, y siempre es bueno saber qué esperar en ese proceso. El tiempo de recuperación se inicia tan pronto como el bebé nace. Puede haber algo de dolor, pero por lo general se administra morfina para aliviarlo. Si la madre se siente bien y si el bebé está sano y le va bien, la madre puede mantenerlo e incluso podrá amamantarlo inmediatamente.
Puede haber algo de molestia después del procedimiento. Esto incluye fatiga, náuseas, dolor y gases. En el primer par de días, habrá una secreción de color rojo o brillante, posiblemente con un poco de material tejido. Esto es perfectamente normal. Caminar hará que la nueva mamá se sienta mejor, y ella puede hacerlo con ayuda de alguien tan pronto como el médico o una enfermera lo apruebe. Tres o cuatro días después de la cesárea, el médico retirará los puntos o las grapas de la herida.
En este periodo, la nueva mamá necesita toda la ayuda que pueda conseguir, porque necesita mucho descanso. Caminar promueve la curación y evita la formación de coágulos de sangre, y después de seis a ocho semanas después de la cirugía, será conveniente hacer ejercicio moderado y continuar la actividad sexual. La cicatriz empezará a disminuir y su color será más similar al color natural de la piel. Si el lugar de la incisión comienza a hincharse o si hay algún tipo de secreción de la misma, junto con fiebre, la mamá tendrá que ver a un médico.
Otros problemas pueden incluir el estreñimiento y el dolor. Mucha agua le ayudará con el estreñimiento y también los medicamentos indicados se pueden tomar para el dolor. Sin embargo, esto también se debe discutir con un médico, ya que algunos medicamentos, como la aspirina, no son buenas para el bebé, que puede recibirlos a través de la leche materna.
Los niveles hormonales suelen cambiar en este período, por lo que algunos cambios de humor y estados altamente emocionales son de esperar. En caso de que la madre se sienta muy deprimida, ajenos al bebé, tenga pensamientos de hacerse daño a sí misma o al bebé, puede ser un caso de la depresión post-parto. Este es un estado mental muy grave y si una persona cercana a la madre se da cuenta de los signos de la misma, se debe informar de inmediato a un profesional médico.
En el período posterior al parto, las madres deben evitar la tensión física y psicológica, se debe tratar de disfrutar del nuevo bebé tanto como sea posible y de vez en cuando, deben encontrar tiempo sólo para sí mismas. Finalmente, una cesárea no será recordada como un acontecimiento doloroso y estresante, sino más bien como una que dio vida a un nuevo bebé maravilloso.