La dermatitis seborreica es un tipo de eczema que es bastante común y afecta a las glándulas sebáceas de la piel.
La piel humana contiene dos tipos de glándulas, las sudoríparas y las glándulas sebáceas. Las glándulas sudoríparas producen el sudor como una forma de enfriar el cuerpo a altas temperaturas y de exponer las sustancias de desecho. Las glándulas sebáceas, sin embargo, producen un aceite llamado sebo que lubrica la piel y el cabello, nutre e hidrata los mismos.
En la dermatitis seborreica las glándulas sebáceas producen más sustancias, que se vuelven amarillas y se asemeja a la pus. Este tipo de actividad de las glándulas sebáceas indica que el sistema inmune está trabajando horas extras debido a la mayor cantidad de toxinas que necesita ser expulsadas. Básicamente, esto significa que hay demasiadas toxinas en el cuerpo y esta cuestión debe abordarse. También puede significar que existe una deficiencia o que el cuerpo necesita reponer.
La dermatitis seborreica, a diferencia de la atópica o dermatitis de contacto, es causada por un factor interno, más comúnmente algún aspecto de la dieta. Para la mayoría de las personas que tienen problemas con esta condición, es la razón de una dieta rica en grasas saturadas, azúcares procesados y comida chatarra. Algunos tipos de comida chatarra causan el crecimiento excesivo del candida que a su vez provoca brotes de eczema.
Esta condición de la piel es más visible y presente sobre todo en las zonas que tienen mayor número de glándulas sebáceas, como el cuero cabelludo, la nariz y el área alrededor de la nariz, detrás de las orejas y el pecho.
El primer paso en el tratamiento de la dermatitis seborreica es hacer cambios en los hábitos alimenticios. Las grasas saturadas y azúcares procesados deben ser eliminados de la dieta y reemplazados con alimentos ricos en fibra, vitamina E y aceites esenciales insaturados. La mejor idea es consultar a un médico o un nutricionista que va a determinar qué aspectos de la dieta pueden ser la causa de los problemas con la dermatitis seborreica, y qué alimentos pueden ayudar a luchar contra ella.
La fibra es importante porque lucha con el crecimiento excesivo del candida, mientras que los ácidos grasos y la vitamina E ayuda a las células de la piel a permanecer hidratadas.
La dieta debe incluir verduras frescas como el brócoli, la col rizada, la espinaca, la col y otras sustancias ricas en minerales importantes y, por supuesto, la fibra. El beta-caroteno es también importante, ya que mejora el sistema inmunológico.
En cuanto a los productos cosméticos, los mejores son los que contienen vitaminas E y C, ácidos grasos esenciales y beta-caroteno. Esos nutrientes por lo general provienen de borraja o aceite de cártamo, las zanahorias y los albaricoques. El mercado actual ofrece, muchos productos que prometen curar la dermatitis seborreica, pero es importante elegir uno que sea adecuado para el tipo de piel y cabello, y que no cause más complicaciones.