En las siguientes líneas, trataremos de elaborar más de cerca una cirugía de transgénero. Hablando en términos técnicos, una persona nunca puede cambiar completamente el género, razón por la cual esta cirugía se llama cirugía de reasignación de sexo.
Lo que los médicos están tratando de hacer está relacionado con el cambio de apariencia física de una persona, de modo que la anatomía puede ser lo más similar posible a la anatomía del sexo opuesto. Las características sexuales secundarias se modifican con la terapia hormonal. Existe la creencia de que el pene y los testículos están siendo amputados en este tipo de cirugía, pero eso es una suposición falsa. Se extrae el tejido interno del pene y la piel externa del pene solo se inserta en el cuerpo para ser una vagina. El tejido escrotal de los testículos se utiliza para la formación de labios vaginales.
El procedimiento
Cuando está bajo anestesia total, el paciente está preparado para el cambio de sexo. El cirujano plástico separa la piel del pene y le quita la piel. Esa piel se usa para crear un pene invertido que será una nueva vagina. Antes de este procedimiento, se deja un pequeño trozo de tejido con el propósito de crear una sensación sexual en esa área cuando está bajo algunos estímulos. Luego, el clítoris está hecho de tejido eréctil y después de eso, se hace una abertura urinaria femenina. Para tener un orgasmo sexual completo, los músculos abdominales se colocan alrededor de la nueva vagina para que la vagina pueda apretar. Todo está lleno de gasa quirúrgica, de modo que puede tener la forma adecuada y permanecer en ese lugar. Todo está soportado por un alambre quirúrgico delgado, que se puede quitar, junto con la gasa, después de siete días.
El período postoperatorio no toma mucho tiempo, solo necesita permanecer en cama durante 7-8 días y el dolor aparece solo al estornudar o toser. La vejiga también se está recuperando lentamente. Deben transcurrir seis semanas antes de que una persona regrese a sus actividades sexuales.
Requisitos para la cirugía
Hay algunos estándares que deben cumplirse si una persona desea someterse a este procedimiento. Las personas deben vivir al menos un año en el nuevo rol de género; tienen que tomar terapia hormonal por lo menos un año y recibir recomendaciones de psicólogos o terapeutas después de asistir a las sesiones, así como recomendaciones psíquicas de que gozan de buena salud mental. Si se proporciona todo esto, se realiza la prueba del VIH y se programa una entrevista individual con un cirujano. Si uno decide dar este gran paso, y luego se decepciona, siempre hay una opción para continuar la vida en el viejo género.