La estimulación cerebral profunda es un procedimiento quirúrgico en el que se colocan sondas especiales en el cerebro. La cirugía puede tener una o dos etapas y se realiza bajo anestesia general o local. La RM se utiliza siempre para determinar con precisión el objetivo deseable dentro del cerebro.
Después de que se detecta el lugar específico en la implantación, el paciente es llevado a la mesa de sala de operaciones. El procedimiento mismo requiere el uso de marco estereotáctico y un pequeño agujero de 14 mm de promedio que se hace en el cráneo. Después de llegar al cerebro, los electrodos se colocan en el lugar específico y después se recortan a los huesos del cráneo por un gadget de fijación especialmente diseñado. Según la enfermedad y el objetivo de la terapia, los electrodos pueden colocarse en tálamo, subtálamo o globus pallidus.
Complicaciones relacionadas con el dispositivo insertado
Algunos pacientes experimentan efectos secundarios de anestesia general o local. Las complicaciones pueden ocurrir como resultado de la colocación de electrodos y componentes adicionales en el cerebro. La inserción puede conducir a una hemorragia cerebral tanto del cráneo como de las estructuras intracraneales. La peor consecuencia posible relacionada con el sangrado es un derrame cerebral. La hemorragia cerebral y el edema consiguiente son condiciones serias y urgentes que requieren una atención quirúrgica inmediata.
La herida puede infectarse después de la cirugía y para reducir el riesgo de infección postoperatoria, a todos los pacientes que se han sometido a la cirugía de estimulación cerebral profunda se les administran antibióticos. La infección puede dar lugar a la necesidad de la eliminación de algunos componentes que luego se colocarán de nuevo después de que la infección ha curado.
Algunas piezas o componentes pueden romperse o los cables pueden desconectarse. Esto requiere la reparación adicional. Las baterías que se utilizan en la estimulación pueden expirar dentro de un período de tres a cinco años y luego se sustituyen por otras nuevas.
En ocasiones muy raras la piel puede ser perforada por el sistema. Esto sucede como resultado de la cantidad muy pequeña de tejido blando y sólo la piel presente en el lugar de la inserción. Incluso el cable puede ser dislocado debido a su rotura. Sin embargo, esto no ocurre muy a menudo.
Complicaciones de la estimulación cerebral profunda
Este abordaje quirúrgico puede ser útil y eficaz en ciertos casos médicos. Por otro lado, los efectos secundarios neuropsiquiátricos son bastante probables.
Algunos efectos secundarios como alucinaciones, confusión de apatía ya han sido reportados. Incluso la depresión y el aumento de la sexualidad pueden ser una consecuencia de la cirugía de estimulación cerebral profunda. Independientemente del efecto secundario que se produzca, se relaciona principalmente con la inserción incorrecta de la simulación o su ajuste inadecuado. Se ha observado entumecimiento en el área facial o en las extremidades superiores o inferiores. Los músculos de los brazos y las piernas pueden ser rígidos o débiles. Los problemas con el caminar y la estabilidad son potenciales también. Los problemas oculares incluyen, como la visión doble.
Un estudio informó problemas con la toma de decisiones. También puede ser posible que un paciente se enfrente a dificultades con el aprendizaje y los problemas de atención. Incluso hubo tendencias suicidas. Algunos de los efectos secundarios son reversibles mientras que otros permanecen para la vida.
Si por casualidad los electrodos se mueven desde el lugar original de inserción, puede haber algunos cambios severos en la personalidad.