El estado de emergencia espiritual viene después de una súbita sensación de experimentar niveles de conciencia y transformación de energía que no son fáciles de entender.
Cuando esto sucede, una persona se siente particularmente sensible, vulnerable, fragmentada, confusa e incluso temerosa de los estímulos entrantes. Durante estos estados, la persona puede incluso ignorar el cuidado básico de sí mismo y sumergirse completamente en el nuevo estado psicológico. Como estas situaciones pueden ser diferentes y traumáticas, no tan fácil de entender y algunas personas necesitan ayuda.
La transformación espiritual también se conoce como el despertar Kundalini y puede marcar un punto de inflexión crucial en la vida y la conciencia de una persona. El proceso es muy personal y los síntomas varían desde síntomas físicos intensos hasta síntomas emocionales y psicológicos. La energía recién obtenida puede barrer a través de todo el sistema psicológico y físico de una persona que trae nuevas revelaciones y resoluciones. Estos cambios cubren todas las capas de una persona y ocurren a través de aspectos fisiológicos, emocionales, mentales y espirituales.
Hay 7 categorías establecidas del despertar Kundalini que siguen todo el proceso. El primero es el movimiento pránico con una manifestación de gran energía física que elimina los bloqueos fisiológicos por un flujo constante de energía que trae experiencias y recuerdos perdidos desde hace mucho tiempo, acompañados de fuertes y intensos movimientos bruscos del cuerpo. El segundo es el fenómeno Yogic, donde los individuos realizan posturas yóguicas y gestos de mudra de mano que no conocen en el estado normal de conciencia. También puede producir palabras sánscritas o encontrarse escuchando mantras antiguos o música interior. Los trastornos de la respiración también son normales, que van desde la respiración superficial o profunda hasta la ausencia de respiración. La tercera categoría son los síntomas fisiológicos generados por el despertar y éstos son: problemas cardíacos, dolores en la cabeza y de columna vertebral, problemas nerviosos y trastornos gastrointestinales, pero también sensaciones físicas como quemar la hipersensibilidad a la entrada sensorial, hiperactividad o letargo con grandes variaciones en el deseo sexual o espontáneos orgasmos. Estos síntomas pueden ser erráticos e incontrolables, apareciendo de repente y no reaccionando a ningún tipo de tratamiento médico. La cuarta es trastorno psicológico, porque la Kundalini desafía directamente la conciencia actual y el sistema psicológico. Esto produce un período de desequilibrio y confusión, donde la gente se siente como en una montaña rusa emocional con sentimientos de ansiedad, depresión y amor, compasión y alegría cambiando de uno a otro de repente. La quinta son las experiencias extra sensoriales donde las personas experimentan fenómenos fuera de la realidad consciente, como manifestaciones de luces, entidades, símbolos, voces y música, aromas de rosa o incienso. Pérdida de sensación del cuerpo o sensación desproporcionada y desorientada. El sexto son los fenómenos psíquicos como la telequinesis, la precognición y la telepatía, la conciencia de las auras y las habilidades curativas. La séptima categoría son los estados místicos de la conciencia, donde la persona cambia a un estado alterado que percibe directamente la unidad de todas las cosas en la vida y puede ser tan fuerte que induce un episodio psicótico. Esto puede confundirse con episodios de psicosis, manía, depresión, esquizofrenia y tratarlos con medicamentos, puede ser un método muy malo para este estado.