Muchas personas toman el trasplante de órganos por sentado. Consideran que es un mero procedimiento quirúrgico sin tener en cuenta su complejidad y el proceso en su conjunto. A saber, el proceso de trasplante no comienza en la sala de operaciones, sino más bien muchos meses, incluso años antes, mientras que desesperadamente esperan en la lista de órganos para un donante adecuado.
Es una lucha larga y dura para el paciente y su familia, con un resultado a menudo desconocido. Por último, para los que tienen la suerte de tener sus órganos sustituidos, sólo comienza otra batalla, ya que hay numerosos posibles problemas y complicaciones que podrían ocurrir durante todo el período postoperatorio de la vida.
Posibles problemas y complicaciones
Desafortunadamente, hay muchos. Los pacientes que se someten al trasplante con éxito deben permanecer en el hospital durante semanas, bajo constante atención de sus médicos.
Después de ser lanzados a casa, los pacientes están bajo peligro constante, puesto que hay un peligro constante del pulmón que es rechazado por su organismo. Por lo tanto, los escáneres de rayos X regular, numerosos medicamentos y pruebas deben ser conducidos y tomados con el fin de asegurar una recuperación positiva.
Si existe una sospecha de rechazo de órganos trasplantados, se toman muestras quirúrgicas para el análisis y se llevan a cabo numerosos procedimientos molestos durante un período aún mayor que un año.
La terapia
Con el fin de prevenir el rechazo del órgano trasplantado, los pacientes reciben tres tipos de fármacos inmunosupresores. La dosis y la cantidad varían durante la terapia haciendo que las pruebas regulares y el chequeo sean imprescindibles. También, numerosos antibióticos se introducen para combatir cualquier posible infección. A medida que la recuperación progresa, la cantidad de medicamentos disminuye y cambia. Si existe certeza médica de que el pulmón ha sido trasplantado y aceptado satisfactoriamente por el organismo del paciente, la terapia se detiene y se considera exitosa en sí misma. Sin embargo, incluso después, cuando el paciente es enviado a casa, son necesarios controles frecuentes para evitar que se produzcan complicaciones.
Efectos secundarios y complicaciones
Los fármacos administrados durante la terapia pueden desencadenar algunas infecciones y causar condiciones no deseadas en el organismo del paciente. Esa es otra razón más para que los exámenes regulares antes mencionados sean realizados por los médicos involucrados.
Dado que los medicamentos pueden causar numerosos problemas con respecto a la presión arterial, el aumento de peso corporal, la salud de los huesos y los riñones, una nutrición adecuada y ejercicios regulares del cuerpo también son necesarios durante el proceso de recuperación. Estos fármacos hacen al paciente propenso a numerosas enfermedades cancerosas, sólo haciendo hincapié en la necesidad de un organismo fuerte y saludable ganado a través de una nutrición adecuada y estilo de vida.