Un aborto quirúrgico es un procedimiento extremadamente común y de hecho se considera que es el procedimiento quirúrgico más comúnmente realizado. La naturaleza de rutina del procedimiento, a veces, puede enmascarar las complicaciones con las que puede estar.
Recuerde que es un procedimiento quirúrgico invasivo que conlleva algunos riesgos y una pequeña posibilidad de complicaciones.
¿Son seguros los abortos quirúrgicos?
En términos generales, los abortos quirúrgicos llevados a cabo en el primer trimestre del embarazo se consideran seguros con un bajo riesgo de complicaciones. El mismo procedimiento llevado a cabo más adelante en el embarazo puede estar asociado con un mayor riesgo de efectos adversos después del procedimiento.
Algunas de las complicaciones asociadas con los abortos quirúrgicos incluyen:
- Reacción adversa a la anestesia: si bien la mayoría de los abortos quirúrgicos se pueden realizar con anestesia local, el cirujano a veces puede decidir realizar el procedimiento con anestesia regional o general. Estos riesgos son los mismos que con cualquier tipo de cirugía.
- Lesión: existe la posibilidad de que el revestimiento del cuello uterino se lesione durante el procedimiento.
- Infección: las posibilidades de que ocurra una infección bacteriana en el útero después del procedimiento son de leves a moderadas, aunque aumentan mucho si hay una infección preexistente. El paciente debe asegurarse de que el médico sepa sobre cualquier ETS que puedan haber contraído, así como asegurarse de que los antibióticos postoperatorios se estén tomando según lo indicado.
Los síntomas de la infección comenzarán a aparecer un par de días después del procedimiento e incluyen calambres, dolor en la parte inferior del abdomen, fiebre y sensibilidad. El paciente debe informar al médico si aparecen tales síntomas para que la medicación postoperatoria pueda ajustarse según se considere necesario.
- Perforación de la pared uterina: esta es una complicación rara y que en realidad no requiere ningún tratamiento como tal. El paciente puede quejarse de un poco de dolor y sangrado después de completar el procedimiento. En algunos casos, se puede realizar una laparoscopia para verificar si el sangrado se ha detenido o no.
- Tejido retenido del embarazo: en circunstancias muy raras, hay posibilidades de que el tejido del embarazo no se elimine por completo del útero. A veces, se puede observar que el embarazo fue de naturaleza ectópica y, por lo tanto, no se localizó en el útero solo después de que se inició el procedimiento.
En tal caso, se puede requerir que el paciente se someta a otro procedimiento para que el tejido del embarazo pueda eliminarse por completo. Los pacientes también deben tener en cuenta que a veces los síntomas del embarazo pueden tardar unos días en desaparecer una vez finalizado el procedimiento, por lo que no debe entrar en pánico si todavía cayeron del mismo modo que antes del aborto quirúrgico.
Conclusión
Un aborto quirúrgico es uno de los procedimientos más seguros que se llevan a cabo, sin embargo, eso no socava algunos de los riesgos potenciales que conlleva. Los pacientes deben comprender cuidadosamente el procedimiento y hablar con sus médicos de antemano para que sepan exactamente qué esperar.