Una mandíbula rota se refiere a una fractura de la mandíbula, mientras que una mandíbula dislocada es donde la parte inferior de la mandíbula se mueve fuera de posición.
Ambas lesiones tienen una variedad de causas, incluyendo trauma facial. Estirar demasiado la mandíbula, por ejemplo al bostezar o morder, también puede causar dislocación.
Ambas lesiones pueden causar dolor severo en la mandíbula y la cara y también pueden restringir el movimiento de la mandíbula. Una mandíbula rota puede causar moretones e hinchazón en la cara, mientras que una dislocación puede hacer que la mandíbula inferior se desequilibre con el cráneo.
El tratamiento para una mandíbula rota depende de la gravedad de la lesión. En casos leves, las intervenciones médicas son innecesarias. Un médico a menudo puede tratar una mandíbula dislocada reposicionándola manualmente.
Este artículo discutirá las causas, los síntomas y los tratamientos para las mandíbulas rotas o dislocadas.
¿Qué encontrarás aquí?
Causas
Una mandíbula rota o dislocada puede causar un dolor intenso y restringir el movimiento.
Los médicos llaman mandíbula a la parte inferior de la mandíbula. Está separado del resto del cráneo.
La mandíbula se conecta al cráneo a través de las articulaciones temporomandibulares (ATM), que permiten que la mandíbula se abra y cierre.
Cuando el hueso de la mandíbula se rompe o se rompe, la lesión puede resultar en una ruptura completa con un desplazamiento del hueso, o una fractura sin desplazamiento del hueso.
Una dislocación de la mandíbula se produce cuando la mandíbula se separa de uno o ambos de los ATM.
El maxilar, o parte superior de la mandíbula, también puede romperse. Sin embargo, los médicos suelen considerar estas lesiones como fracturas faciales en lugar de una mandíbula rota.
El traumatismo en la cara también puede provocar una ruptura o dislocación de la mandíbula. Cuál de estas dos lesiones ocurre depende de la ubicación del trauma y del grado de fuerza. El trauma puede tener muchas causas diferentes, como una caída o una lesión deportiva.
Abrir la boca demasiado es una causa común de una mandíbula dislocada. Esto podría ocurrir a través de:
- bostezando
- mordaz
- vomitar
- un procedimiento dental
Un trastorno de la ATM causa dolor y afecta el movimiento de la mandíbula. Las personas con estos trastornos tienen un mayor riesgo de dislocarse la mandíbula. Las personas que se han dislocado antes de la mandíbula también tienen un mayor riesgo de dislocación de la mandíbula.
Los síntomas
Una persona con una mandíbula rota puede sentir dolor al masticar.
Una mandíbula rota o dislocada tiene síntomas similares. Pero hay algunas diferencias clave.
Los síntomas de una mandíbula rota incluyen:
- dolor en la cara o mandíbula
- dolor al mover la mandíbula, como abrir la boca o masticar
- moretones e hinchazón en la cara
- rigidez y dificultad para mover la mandíbula
- dientes desplazados
- entumecimiento de la cara
- mandíbula moviéndose hacia un lado al abrir
El traumatismo facial que causa una fractura de mandíbula también puede afectar otras áreas de la cara. Por ejemplo, la lesión también puede dañar la nariz, la boca o la mejilla. Esto puede causar más síntomas.
Los síntomas de una mandíbula dislocada incluyen:
- dolor en la cara o mandíbula
- la parte inferior de la mandíbula no está alineada con la parte superior
- rigidez y dificultad para mover la mandíbula
- incapacidad para cerrar la boca
- mucha o poca fuerza de mordedura
Tratamiento
Las mandíbulas rotas y dislocadas a menudo requieren atención médica inmediata. Es esencial sostener la mandíbula hasta recibir ayuda médica. Esto se puede hacer sujetando manualmente la mandíbula en su lugar o usando un vendaje alrededor de la cabeza y debajo de la mandíbula.
Los tratamientos para las mandíbulas rotas y dislocadas son diferentes.
Tratamientos de la mandíbula rota
Tratar una mandíbula rota dependerá de la gravedad de la lesión. Las fracturas menores a menudo se curan solas, sin la necesidad de una intervención médica. Sin embargo, un médico puede sugerir que una persona tome medicamentos para el dolor para aliviar el malestar y consuma una dieta líquida o suave para evitar empeorar la lesión.
Las roturas más severas requerirán intervenciones médicas o cirugía. Puede ser necesario atornillar placas metálicas o alambres a los lados de la mordaza para sostenerla mientras sana. El proceso de curación puede tomar varias semanas. Después de este período, una persona puede necesitar hacer algunos ejercicios para fortalecer los músculos de la mandíbula que han estado inactivos durante semanas.
Tratamientos de la mandíbula dislocada.
Bostezar puede causar más lesiones si una persona se disloca la mandíbula.
Un médico a menudo puede tratar una mandíbula dislocada reposicionándola manualmente. Esto es lo que los médicos llaman una reducción manual.
Para realizar una reducción manual, un médico colocará sus pulgares contra la parte posterior de los dientes inferiores dentro de la boca.
Colocarán sus dedos restantes debajo de la mandíbula. Con un agarre firme en la mandíbula, los médicos colocarán la mandíbula en su lugar.
En algunos casos, el médico puede usar un vendaje Barton. Estos son vendajes de apoyo que van alrededor de la cabeza y la mandíbula. Esto ayudará a restringir el movimiento y a sostener la mandíbula mientras sana. Puede ser usado por unos días después.
Un médico también puede recomendar no bostezar o cualquier otra extensión de la mandíbula durante un tiempo específico después del tratamiento, ya que los movimientos extremos de la mandíbula podrían retrasar la recuperación o causar más lesiones.
En los casos más graves, la cirugía es una opción. Por ejemplo, reducir el tamaño de los ligamentos alrededor de la mandíbula puede ayudar a apretar la articulación y prevenir nuevas lesiones.
Conclusión
La perspectiva para las mandíbulas rotas o dislocadas varía según la gravedad de la lesión.
Una ruptura menor a menudo puede curarse por sí sola sin la necesidad de una intervención médica. Las roturas más graves probablemente requerirán dispositivos médicos de apoyo alrededor de la mandíbula. El proceso de curación puede llevar varias semanas o meses.
El tiempo de recuperación puede ser más largo si la mandíbula no recibe suficiente descanso. La cirugía también puede extender el tiempo para una recuperación completa.