La anemia se define como una condición en la que hay una falta de hemoglobina. La hemoglobina es una proteína contenida en los glóbulos rojos y es responsable de la transferencia de oxígeno y dióxido de carbono a través del cuerpo. Cada molécula de hemoglobina contiene un átomo de hierro, y el hierro es muy importante para el correcto funcionamiento de la hemoglobina. La anemia por deficiencia de hierro (anemia sideropénica) es el tipo más común de anemia y por lo tanto vamos a discutir sus posibles causas, signos y síntomas, así como opciones de tratamiento.
Causas de la anemia por deficiencia de hierro
La anemia por deficiencia de hierro puede aparecer ya sea por el aumento de la pérdida de hemoglobina o debido a una ingesta inadecuada de hierro. La pérdida de hemoglobina es a menudo causada por sangrado agudo o crónico. Por ejemplo, las mujeres que tienen sangrado menstrual abundante por lo general sufren de anemia por deficiencia de hierro, que se cura espontáneamente después de la menopausia. El sangrado gastrointestinal debido al uso excesivo de analgésicos, úlceras pépticas o cáncer también puede causar anemia por deficiencia de hierro.
La ingesta inadecuada de hierro se observa a menudo en los vegetarianos. Aunque muchas verduras son ricas en hierro, su forma en las plantas no es ideal para la absorción en nuestro intestino delgado. La carne contiene hierro bivalente que es mucho más fácil de absorber. Sin embargo, los vegetarianos todavía pueden alcanzar niveles óptimos de hierro, pero si decide no comer carne, es necesario planificar su dieta con cuidado para consumir todos los microelementos necesarios, incluyendo hierro.
La anorexia y la bulimia son otras causas potenciales de una ingesta insuficiente de hierro. La malabsorción del hierro (una disminución de la capacidad del intestino para absorber el hierro) también se reconoce como un problema en algunos pacientes con enfermedades gastrointestinales, como la enfermedad celíaca y la enfermedad de Crohn.
Signos y síntomas de la anemia
Los síntomas de la anemia dependen de la gravedad de la deficiencia de hierro. Fatiga, sensación de debilidad y baja energía son los primeros síntomas de la anemia. Estos síntomas pueden aparecer incluso con niveles ligeramente disminuidos de hierro. La deficiencia moderada de hierro viene con problemas de concentración, dolores de cabeza, y si dura mucho tiempo, incluso la pérdida de peso. Los dolores de cabeza debido a la anemia pueden ser muy severos y son causados por la oxigenación insuficiente del tejido cerebral, que depende altamente de la fuente de oxígeno buena. Desmayo y dificultades respiratorias pueden aparecer con deficiencia de hierro severa. Los signos de deficiencia de hierro incluyen la piel pálida, la lengua cubierta, y el cabello quebradizo y las uñas. Los problemas de depresión no son raros en la anemia ferropénica no reconocida y no tratada.
El diagnóstico de anemia por deficiencia de hierro es muy sencillo y se basa en los niveles de hemoglobina, hematocrito y hierro, así como indicadores adicionales de anomalías en la concentración de hemoglobina.
Tratamiento para la anemia
El tratamiento adecuado para la deficiencia de hierro requiere tratar la causa. Es necesario descubrir cualquier posibilidad de hemorragia gastrointestinal (análisis de sangre oculta en heces). Se aconseja aumentar la ingesta de fuentes de hierro bien digeribles, especialmente la carne. Para los vegetarianos, las opciones posibles son la soja, los alimentos de grano entero, la espinaca, la col rizada, etc. Los suplementos de hierro se recomiendan para casos moderados y graves.