Investigadores del Instituto Francis Crick descubrieron un nuevo fármaco para el cáncer intestinal específico de las células tumorales, y por lo tanto, menos tóxico que las terapias convencionales.
«Desde hace tiempo existe la necesidad de encontrar medicamentos más eficaces y menos tóxicos para tratar el cáncer intestinal», dice Laura Novellasdemunt, primera autora del trabajo e investigadora del Instituto Francis Crick. «Hemos encontrado un nuevo objetivo de medicamentos que podría proporcionar la base para una mejor terapia en pacientes en el futuro».
La mayoría de los cánceres intestinales son causados por una mutación en un gen llamado APC que en su forma saludable actúa para prevenir la formación de cáncer. Los genes APC mutados causan un exceso de actividad de una vía de señalización celular llamada ‘Wnt’, que se ha asociado con cáncer de intestino durante más de 20 años.
La señalización de Wnt es vital para muchos órganos, por lo que los fármacos diseñados para bloquear la señalización de Wnt en el cáncer causan efectos secundarios muy tóxicos en otras partes del cuerpo. Este ha sido un gran obstáculo para desarrollar terapias contra el cáncer intestinal eficaces y seguras.
El equipo de Crick ha encontrado una forma de apuntar exclusivamente a la señalización de Wnt en las células tumorales, que reduce el crecimiento de tumores derivados de células de cáncer de colon sin los efectos tóxicos en las células sanas.
El equipo utilizó la herramienta de edición de genes CRISPR para cortar el gen APC en varias posiciones y encontró una parte crucial del gen que causa niveles peligrosos de señalización de Wnt y formación de cáncer.
Utilizando una serie de técnicas moleculares, identificaron una proteína implicada en la sobre activación de la vía Wnt en el cáncer. La prevención de la actividad de esta proteína mediante la deleción genética o el bloqueo de la misma con fármacos provocó una reducción de la señalización de Wnt en las células cancerosas y ralentizó el crecimiento tumoral en ratones. Es importante destacar que se descubrió que el fármaco actúa exclusivamente en las células tumorales y no tiene ningún efecto sobre la señalización de Wnt en células sanas.
«El tratamiento actual para el cáncer de intestino es generalmente genérico, mientras que la terapia dirigida ayudará al desarrollo futuro de la medicina personalizada», dice Vivian Li, autora principal del artículo y líder de grupo en el Instituto Francis Crick. «La proteína que hemos identificado tiene una gran promesa como objetivo terapéutico para el tratamiento del cáncer intestinal».
El próximo paso será ver si la eliminación del gen que produce la proteína en ratones evitará que desarrollen cáncer intestinal. Esto proporcionará evidencia adicional de que la proteína es un objetivo viable de medicamentos contra el cáncer.